Los profesionales de los Servicios de Urgencias y Emergencias extrahospitalarias del SAS se movilizaron ante la Delegación Territorial de la Consejería de Salud y Familias para pedir mejoras en las condiciones laborales y en el equipamiento y prestaciones de las UVI móvil.
Manoli Mayo, enfermera de la UVI Móvil del Servicio de Urgencias y Emergencias Extrahospitalarias del SAS, explicó que “tras la integración del 061 al SAS queremos tener las mismas dotaciones porque somos como ellos”.
Por eso piden “la creción de un único servicio de urgencias y emergencias que englobe al 061 y al SAS” y tengan las mismas condiciones. Y es que Mayo defendió que los equipos de emergencias y urgencias del SAS cubren el 80 por ciento de las actuaciones de este tipo en Andalucía, y pese a eso, afirmó que son “invisibles para la Administración”.
También explicó que luchan por dar una “asistencia de calidad a todos los gaditanos. Nos conocerán porque somos, en el 80 por ciento de los casos, los que acudimos a sus domicilios”. Y recordó que en Andalucía son casi 400 UVI móvil frente a 34 de 061.
En Cádiz la plantilla ronda las 300 personas afectadas, unos trabajadores que durante la pandemia se vieron también muy afectados. “No teníamos medios en marzo y abril de 2020 y nos lo compramos nosotros para atender al 80 por ciento de los pacientes Covid. Muchos nos contagiamos, pero no dejamos de actuar. Sin embargo, el reconocimiento fue solo para 061”.
Explicó que “no se nos pagan nocturnidades, festivos, peligrosidad... cobramos lo mismo que quien atiende en consulta de lunes a viernes”.
La delegada de Salud, Isabel Paredes, recibió a cuatro representantes, recogió las reivindicaciones y avisó de que no será fácil, pero prometió que aunque ella no tiene capacidad, lo transmitirá a quien la tiene.
Mayo se mostró esperanzada tras la reunión: “No está ganado, pero que nos escuchen es un gran paso”.
