Las autoridades prorrusas de Jersón, parcialmente ocupada por las tropas rusas, han anunciado este miércoles la extensión del estado de emergencia a toda la región por las inundaciones registradas a raíz del ataque a la presa de Kajovka.
Así, han alertado de que la localidad de Korsunka se encuentra "totalmente sumergida debido a la descarga descontrolada de agua desde la reserva" tras el ataque, según informaciones de la agencia de noticias rusa TASS.
El Gobierno ucraniano, por su parte, ha alertado de que unas 42.000 personas se encuentran en la "zona de desastre", donde podrían registrarse graves inundaciones durante los próximos días, por lo que ha alertado de que la "verdadera magnitud de lo sucedido se desconoce por el momento".
Previamente, las autoridades prorrusas de la zona habían declarado el estado de emergencia en la localidad de Nueva Kajovka. Con esta medida, buscaban agilizar las actuaciones de emergencia a medida que aumenta el nivel del agua, que ha ascendido más de diez metros en algunos puntos.
Moscú sigue negando cualquier implicación en el ataque, mientras que Kiev insiste en que la autoría es rusa. "Fue una explosión deliberada. Sabían exactamente lo que estaban haciendo", dijo el martes el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski.