“Todo el libro soy yo. Mi pluma es mi arma y me he tomado a mí mismo como objetivo”, afirmó Manuel de Lope (Burgos, 1949) en una entrevista con Efe, que tiene lugar en su casa de Madrid y en la que comenta algunas claves de esta obra innovadora y sincera, que está muy lejos de ser una autobiografía al uso.
Con maestría y con esa extraordinaria prosa que hay en cada uno de sus libros, Manuel de Lope mezcla en Azul sobre azul (RBA) el diario, las memorias, el ensayo y el relato de viajes con ráfagas de actualidad y crítica literaria y artística.
Considerado uno de los principales novelistas españoles, De Lope se olvida en su nueva obra de la disciplina que entraña la novela, para adentrarse por los vericuetos de la memoria y evocar episodios de su infancia y juventud o sus viajes por diferentes zonas del mundo y fundirlos con noticias de la guerra de Irak -muy presente
en el libro-, con conversaciones oídas aquí o allá o con esos haikus que tanto le gustan.
Azul sobre azul está escrito a lo largo de 2007. Su origen tiene que ver con el artículo que le pidió un periódico sobre “la relación entre el cambio climático y la literatura”.