Esta concentración reivindicativa se desarrollará entre las 9,00 y las 14,00 horas en la sucursal que CajaSur tiene en La Caleta en señal de protesta porque la entidad no se ha puesto en contacto con los afectados desde que el pasado 11 de enero les transmitiera su intención de estudiar una solución al conflicto, que afecta a unas 250 personas, y les pidiera unos días de margen antes de seguir con las reivindicaciones.
Así lo ha explicado a Europa Press el constructor motrileño, quien mantiene que CajaSur --ahora fusionada con BBK-- "tuvo que hacer las cosas bastante mal" porque hay más constructores con este problema en otros puntos de España que ya se han puesto en contacto con la nueva dirección de la entidad financiera para reclamar los pagos.
Alaminos tampoco ha recibido respuesta del Banco de España respecto al escrito que envió denunciando "malas prácticas bancarias" por parte de CajaSur y ya ha puesto el caso en manos de su abogado al objeto de iniciar nuevas acciones por la vía administrativa.
En el escrito remitido al Banco de España, el constructor señala que su empresa fue contratada para realizar el edificio mencionado a finales de 2006 por parte de una promotora domiciliada en Castellón, firmándose entonces una hipoteca a la promoción con CajaSur que permitiría su financiación.
No obstante, a finales de 2008 --cuando estaba "ejecutada el 50 por ciento de la obra"-- "la promotora entró en una situación económica y financiera inviable" lo que "supuso la falta de pago de las certificaciones de obra emitidas por la empresa Alaminos e Hijos y "ralentizó" los trabajos.
NEGOCIACIONES FALLIDAS
Tras diversas negociaciones entre el promotor, la constructora y la entidad financiera, se suscribió un pacto ante notario por el que se modificaba el sistema de pagos de la obra, de modo que si se cumplía se garantizaba la financiación y "se aseguraba la imposibilidad" de derivar los fondos hipotecarios destinados al pago de esta promoción a otros fines distintos.
Este acuerdo, junto a las "promesas de la entidad dieron la seguridad necesaria" a la empresa constructora para continuar con las obras, ya que "a partir de ese momento se pasaría a cobrar mensualmente", explica el empresario. No obstante, las condiciones de pago supuestamente no se cumplieron, ya que los ingresos por parte de CajaSur sólo se hicieron durante los meses de enero, febrero y marzo de 2009.
Según denuncia el empresario, a partir de abril CajaSur interrumpió el pago de las certificaciones y dio "preferencia al pagaré pendiente del antiguo sistema de pagos y a los intereses por retrasos". La sospecha que trasmite al Banco de España el afectado es que la entidad no financia los pagarés pendientes a diciembre de 2009 con las disposiciones que seis meses antes hizo la promotora por las obras y tasaciones correspondientes a aquellos meses, sino "con la certificación del mes corriente, de modo que la entidad financiera termina pagando a costa del crédito hipotecario dos veces la misma obra".
A juicio del empresario, esta actuación es "abiertamente incorrecta" en el ámbito bancario y va en contra de lo pactado inicialmente entre las partes. A esta situación se ha añadido además la aparición en este tiempo de "un embargo judicial del crédito hipotecario de casi un millón de euros, a instancia de otro cliente de la entidad y que fue atendido por CajaSur".
En el escrito, Alaminos detalla la "realidad actual" del conflicto, que se traduce en que de los 38 millones de euros destinados a la ejecución de la obra, "a fecha de hoy, con el 90 por ciento de la obra ejecutada y tasada, la entidad financiera ha librado 32,3 millones de euros, de los que el constructor ha cobra 20,1 millones y "se le adeudan 2,4 millones" aparte de las retenciones.