Dos zonas de lo más populares de la ciudad, el callejón del Águila y la barriada Santa Ana, se llenaron de un público ansioso por disfrutar del Carnaval y de degustar productos y cocina autóctona. Las dos zonas, muy cercanas una de otra, se complementaron y el trasiego de público entre langostinos y menudo de cochos fue constante, mientras la mañana se fue despejando y las temperaturas primaverales y casi veraniegas hicieron acto de presencia.
Doscientos kilos de langostinos en cartuchos con tres unidades cada uno fueron consumidos durante la XVII Langostiná organizada por la Peña Carnavalesca Hombres del Campo. Pasada la una de la tarde, el callejón del Águila se llenó de público, muchas familias al completo, de ganas de fiesta y de los ritmos propios del Carnaval gaditano a cargo de las nueve agrupaciones locales que este año participarán en el recuperado concurso en el Teatro Moderno.
Desde muy temprano, una legión de mujeres de todas las edades se encargaba dentro de la peña de ir rellenando los cartuchos con los tres langostinos de rigor, mientras los hombres se afanaban en organizar la barra y el escenario donde tuvo lugar el XVI Concurso de Estribillos de Carnaval, segunda edición bajo el nombre de Perico Soriano, un vecino muy querido. También se entregó el Langostino de Plata, que en esta ocasión recayó en el autor de Carnaval y director del colegio José de la Vega, Manuel Warletta García.
A unos cientos de metros también se escuchaban coplas de Carnaval en el Concurso de Popurrí, mientras vecinos y visitantes disfrutaban con la exquisitez del plato estrella de la II Menudá con Chocos que organizó la Asociación de Vecinos Ermita Santa Ana.
En esta fiesta, también los organizadores tuvieron que levantarse temprano para guisar los cincuenta kilos de chocos y otros tantos de garbanzos que, junto con panceta y otros elementos culinarios, llenaron dos grandes ollas que supieron a poco.
La XVII Langostiná y la II Menudá demostraron que Chiclana tiene ganas de Carnaval. El día 5 comienza la fiesta.
