Sobre estas cantidades totales, Hacienda aplica al sueldo del Rey una retención mínima del 40 por ciento y al del Príncipe, un 37 por ciento.
La Reina, la Princesa de Asturias, y las Infantas Elena y Cristina no reciben una asignación fija, sino que reciben una cantidad en función de gastos de representación que puede variar cada año y que decide el Rey.
En este 2011, Su Majestad ha dispuesto de un máximo de 375.000 euros con cargo a los PGE para repartir entre las cuatro.