-Bartolomé, recientemente ha extendido usted a los restaurantes chinos la invitación de consumir productos andaluces…
-Sí, en enero de este mismo año 2012. En Andalucía hay unos cuatro mil restaurantes asiáticos, no solamente chinos. Sus empresarios han accedido gustosos a integrarse más firmemente en la economía andaluza y a incrementar el consumo de verduras, frutas, aceite, huevos, carnes, cerveza, agua mineral, etc., incluso el arroz, de Andalucía. Esto, indudablemente, beneficia al campo y la industria alimenticia de nuestra región, y contribuye a potenciar su consumo en un grado nada despreciable.
-También lleva usted los productos andaluces a FITUR, ¿cierto?
-Así es. Todos los años nos desplazamos a la Feria Internacional del Turismo, que se celebra en Madrid, y allí entregamos a los visitantes muestras gratuitas, en bolsitas o en botellitas, de lo más significativo de los productos andaluces: aceite, aceitunas, vino, mantecados, membrillo, uvas pasas… Llevamos así quince años ininterrumpidos. Recuerdo que el primer año nos expulsaron del stand y tuvimos que seguir entregando las muestras fuera del mismo, en una mesita de playa. Sin embargo, al año siguiente nos vimos honrados con la presencia del rey de España y del presidente de la Junta de Andalucía, entre otras altas personalidades, que aceptaron y degustaron encantados nuestros productos andaluces. La verdad es que el stand de “¿Yo? ¡Producto Andaluz!” en FITUR es uno de los más visitados y que más simpatías genera.
-Aparte de en Andalucía y en FITUR, ¿promocionan los productos andaluces en otras regiones autonómicas?
-En el 2005 celebramos en Las Palmas la Semana de los Productos Andaluces, que tuvo resonado éxito. Aquí promocionamos no solamente los productos de nuestra tierra, sino también la rica y variada cocina andaluza. Como colofón entregamos al Cabildo una bandera de Andalucía y otra de Torremolinos.
-Tenemos constancia de que a la Casa Real le envían todos los años un lote de productos andaluces, ¿es así?
-Así es, por las navidades. Y todos los años, en nombre de Su Majestad, se nos envía una nota oficial de agradecimiento. Es de destacar que varios de los productos que enviamos a la Casa Real los consume la familia en la cena de Navidad. Igualmente figuraron productos andaluces de nuestra remesa en el cóctel de boda del Príncipe.
-¿Otras vinculaciones con la Casa Real?
-Sí, matizar que en los terrenos del Palacio de la Zarzuela hay un olivo centenario bautizado como “Sofía”, que significa “Sabiduría”, el cual fue donado conjuntamente por el Ayuntamiento de Alhaurín el Grande, Aceitunas Bravo y “¿Yo? ¡Producto Andaluz!”. Además, en la segunda planta del palacio del Príncipe Don Felipe se custodia la cuna artística que “¿Yo? ¡Producto Andaluz!” regaló a los príncipes con ocasión del nacimiento de su primera hija. De esmerado diseño, la cuna fue fabricada por artesanos de varias provincias andaluzas, bajo la dirección del arquitecto D. Miguel Borrego. Es una auténtica obra de arte que los príncipes guardan con cariño.
-Entendemos que ello será motivo de satisfacción para “¿Yo? ¡Producto Andaluz!”.
-¡Por supuesto! Pero también para toda Andalucía. Y a propósito, retomando el asunto de la Casa Real, desde “¿Yo? ¡Producto Andaluz!” hemos invitado al Rey Don Juan Carlos a visitar Torremolinos y la Costa del Sol, tal como hiciera su abuelo Don Alfonso XIII en 1926. Pensamos que el rey es de todos. La presencia del rey da categoría a nivel estatal y mundial, y abre muchas puertas.
-Aunque aún está distante el fin de año, en este 2012 también enviarán el correspondiente lote de productos andaluces a la Casa Real, ¿verdad?
-En ello estamos. Creemos que es indispensable que el rey tenga presentes los productos andaluces. Son un recordatorio de que Andalucía siempre está ahí y de que el campo andaluz es potencialmente rico si se sabe trabajar. Andalucía puede generar infinidad de puestos de trabajo si le damos la oportunidad.
-¿Cuántas poblaciones andaluzas ha recorrido “¿Yo? ¡Producto Andaluz!” promocionando las buenas cosas de Andalucía?
-Han sido más de cuatrocientos los municipios visitados; muchos de ellos, varias veces. Estimo que en estos veinte años habremos recorrido unos cincuenta mil kilómetros promocionando incansablemente los productos andaluces.
Son muchos kilómetros, pero no suficientes para este entusiasta malagueño, vecino de Torremolinos y amante de Andalucía. Bartolomé Florido continuará en la brecha, luchando por la causa loable de promover el consumo de los exquisitos y saludables productos andaluces. (Continúa la próxima semana).
