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Barbate

Barbate, en situación "desastrosa" tras un año sin poder pescar en Marruecos

Un año después de que la UE decidiera no prorrogar el acuerdo de pesca con Marruecos, los pescadores de Barbate esperan una solución que les permita volver "cuanto antes" a faenar en las aguas vecinas y acabar con un parón que ha sido "desastroso" para todo el pueblo.

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  • Imagen de archivo del Puerto 'La Albufera' de Barbate. -

Un año después de que la UE decidiera no prorrogar el acuerdo de pesca con Marruecos, los pescadores de Barbate esperan una solución que les permita volver "cuanto antes" a faenar en las aguas vecinas y acabar con un parón que ha sido "desastroso" para todo el pueblo.

"En Barbate la crisis que vive toda España es doble", ha asegurado hoy a EFE el patrón mayor de la Cofradía de Barbate, Alfonso Reyes, que estos días, como todos los pescadores y armadores de la localidad, sabe que su futuro pende de hilos entre Madrid y Bruselas.

En Madrid el Gobierno debe decidir si prorroga las ayudas que pescadores y armadores afectados por el cese del acuerdo reciben y que expiran el próximo viernes y Bruselas acoge el próximo martes una nueva ronda de contactos entre la Comisión Europea y Marruecos para continuar las negociaciones para un reanudar el acuerdo pesquero.

Entre tanto, el próximo día 14, se cumple un año de que el Parlamento Europeo vetara la prórroga de este acuerdo, con el voto de parlamentarios que argumentaron que provocaba la sobreexplotación de algunas especies y que era ilegal porque interfería en los recursos de la población saharaui.

El veto obligó a unos 70 barcos españoles -andaluces y canarios- a abandonar de inmediato el caladero.

Para Barbate, una de las poblaciones con mayor índice de desempleo y cuyo ayuntamiento tiene problemas desde hace años para pagar la nómina de los empleados municipales, aquel veto fue "la puntilla", según recuerda el patrón mayor de la Cofradía de una localidad que vio cómo una veintena de embarcaciones, casi la mitad de su flota, quedaba paralizada.

En este año la Cofradía de Pescadores ha puesto en marcha un ERE para once empleados y ha tenido que dejar de gestionar las concesiones de la Lonja y la Fábrica de Hielo, en el puerto "casi no hay actividad" y los 380 tripulantes afectados por el cese y que reciben ayudas hacen "vida de parados" en el muelle, aguardando que el problema se arregle.

La situación, cuenta el patrón ha afectado a toda la localidad, porque "esto es como una pescadilla que se muerde la cola" en un pueblo para el que tiene en la pesca "su corazón, su motor".

"Nosotros lo que queremos es pescar", asegura Alfonso Reyes que dice que "a día de hoy" no tiene noticias ni de cuando habrá un nuevo acuerdo ni de, si no es así, si hay intención de prorrogar las ayudas.

Esta misma semana el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, manifestó que tenía "la impresión" de que las negociaciones con Marruecos "se han agilizado por parte de la CE" y expresaba su confianza en que se aprobase "un pacto con aplicación provisional inmediata" para que la flota vuelva a faenar y no dependa de "unas ayudas que tienen unos plazos de duración máximos".

Unas declaraciones que no han calmado "la inquietud" de los pescadores y armadores de Barbate, que celebrarán mañana una asamblea aunque que lo único claro que tienen en la mesa es que el Ministerio de Agricultura ha anunciado que reabría la pesquería del boquerón a partir del día 17 para las flotas el del sur de Galicia y la del Golfo de Cádiz, gracias a una cuota adicional de 650 toneladas conseguida a través de un nuevo intercambio con Portugal.

Los pescadores de Barbate no creen que esto sea ninguna solución porque, según Alfonso Reyes, los cien barcos del Golfo de Cádiz agotarían "en una semana" su cuota, con lo que no les sale rentable preparar las artes, adecentar los barcos y dar de alta al personal.

"Queremos trabajar, pero ¿en qué situación nos encontraríamos dentro de ocho días?", se pregunta, mientras insiste en que lo que ellos necesitan es un nuevo acuerdo de pesca con Marruecos y advierte de que si no se consigue "tendríamos que poner pie en pared y exigir más controles a los productos marroquíes, para que no nos invadan".

De momento, lo que toca es esperar aún más a que se concrete un nuevo acuerdo que aguardan "con optimismo porque parece que había un buen entendimiento" y que, además, incluya algunas de las cuestiones que ellos han reclamado, como que puedan utilizar (al igual que los marroquíes) luces o que se les permita faenar más allá de Kenitra.

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