El núcleo duro de la antigua Batasuna ha establecido una red de decenas de 'asesores' integrada por personas de su confianza con la que controlan la actividad de los ayuntamientos gobernados por la izquierda abertzale, según los datos con los que cuentan los expertos en la lucha antiterrorista consultados por Europa Press
En este entramado se encuentran incluso algunas personas con antecedentes penales por sus actividades pasadas en plataformas del entorno proetarra, dicen estas mismas fuentes.
La cara visible son los alcaldes elegidos en las urnas, pero para las decisiones que afecten al ayuntamiento cuentan con esta 'asesoría' dirigida directamente por el grupo de históricos dirigentes batasunos, los mismos que han capitalizado todo el proceso de formación de Sortu.
Las fuentes consultadas cifran este entramado en unas ochenta personas y sitúan a Joseba Permach como persona clave. Además, en este núcleo duro también podrían figurar habituales dirigentes de formaciones ilegalizadas como Rufino Etxeberria, Pernando Barrena o Juan José Petrikorena.
PENDIENTES DE JUICIO
Todos ellos se encuentran aún a la espera de ser juzgados por su pertenencia a ETA/Batasuna por el que podrían ser condenados a penas de hasta 12 años de cárcel según la petición formulada por la Fiscalía para alguno de ellos.
Los alcaldes pueden nombrar oficialmente a estos 'asesores' impuestos desde 'arriba' y pueden cobrar de los presupuestos públicos del consistorio, quedando su nombramiento registrado en el Boletín Oficial correspondiente.
El núcleo duro formado por cuatro o cinco personas cuenta con subgrupos de delegados formados por dos o tres personas en cada territorio. Por debajo de ellos actua esta red de 'asesores' cuya función es hacer que se cumplan las consignas que emanen de la cúpula batasuna reforzada con el nacimiento de su propio partido político legal, Sortu.
Un ejemplo de estas funciones de supuesta asesoria es la que desempeñaba Josetxo Ibazeta, ex secretario personal del acalde de San Sebastián Juan Karlos Izagirre, de Bildu. Ibazeta dimitió de su cargo tras protagonizar un incidente en la parte vieja de San Sebastián con varios aficionados de la selección española de fútbol.
INCIDENTE CON AFICIONADOS DE 'LA ROJA'
Ibazeta abordó a tres hinchas de 'La Roja' y les profirió varias veces la expresión "Gora ETA militarra". Tras agregar que iba a sacar una pistola y les iba a pegar dos tiros, el imputado alzó su mano diciendo: "Pan, pan, pan". Con este gesto llegó a impactar en la frente de uno de ellos.
La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha rechazado el recurso presentado por Ibazeta contra la decisión del juez Pablo Ruz de atribuirle un delito de amenazas terroristas que habría cometido al realizar estos hechos.
"Sí se colocan en ese contexto en que se profieren, en el que aparece y es reacción a esa aparición de una bandera de España, son expresiones que poco difieren de la línea de actuación característica de la organización terrorista ETA", sostiene la Audiencia Nacional.