El tiempo en: Conil

Jerez

Éxito de la novillada de la Escuela de Tauromaquia en Jerez

Los alumnos evidenciaron buen nivel de preparación

Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
  • Los novilleros del cartel -

La novillada en clase práctica organizada por la Escuela de Tauromaquia de Jerez, resultó un éxito artístico y de público,  que llenó totalmente  tendidos y gradas y buena parte de sol. Lo que demuestra que hay afición, pero el dinero escasea.
Los erales de Santiago Domecq muy bien presentados, dieron un excelente juego por bravura y nobleza, a excepción del último complicado en la embestida.
Los alumnos evidenciaron buen nivel de preparación. Abrió plaza el almeriense José Cabrera, que se mostró placeado y suelto en banderillas. Cortó una oreja  Antonio José Moscoso, hermano de la matadora jerezana Sandra, banderilleó con acierto y toreó con gusto y templanza, mostrándose relajado. Consiguió dos orejas El mexicano Juan Pablo Llaguno cortó una oreja a pesar de estar mal con la espada, dejando grata impresión por su quietud y dominio.
El jerezano Ignacio Bonmati,  muy torero con capa y muleta, hilvanó bellos naturales en una faena que brindó a Álvaro Domecq, cortando una oreja tras fallar con la espada. Representando a la Escuela de Málaga, actuó Joaquín Galdós, hijo del ganadero peruano del mismo nombre,  quien cortó dos orejas, tras una buena  actuación con capote y muleta, testimoniando sitio y oficio. En último lugar actuó el jerezano Miguel Andrades, que puso pares de banderillas y de las  cortas al quiebro. Estuvo valiente y con aptitudes ante el novillo mas complicado. Cortó dos orejas tras una faena tesonera.
Presidió por primera vez el concejal de Fiestas y Turismo Antonio Real, justo en su cometido.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN