El Centro de Torremolinos registra en estos días una masiva afluencia de visitantes, como acreditan también los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) correspondientes al mes de enero, lo que representa el escenario idóneo para una buena actividad comercial, reservada, lógicamente, a los negocios que están adaptados y que disponen de una oferta atractiva y competitiva, y no tanto a los que no lo están.
La fotografía tomada a mediodía de ayer miércoles en Calle San Miguel pone de relieve que, efectivamente, pese a tratarse de fechas de "baja temporada" turística, Torremolinos, y concreta-mente su corazón comercial, registra una afluencia masiva de turistas, que no ha hecho más que confirmar la tendencia al alza del número de visitantes en estas fechas registrada en los últimos cinco años.
Pese a la evidencia, algún sector reducido parece no querer entender que la crítica permanente a Torremolinos, referida a la crisis del comercio, que la hay, pero en toda España, y sobre todo en base a hechos que no se ajustan a la realidad, termina haciendo mucho daño al conjunto del municipio, siendo ésta una responsabilidad tanto de quienes propalan por sistema noticias negativas que introducen el pesimismo, como quienes, de forma consciente o inconsciente, se suman a esta estrategia de descrédito que, a la postre, supone tirar piedras sobre el propio tejado de los intereses generales de Torremolinos.
Si una imagen vale más que mil palabras, la que se adjunta resulta suficientemente explicativa para demostrar que la masiva llegada de visitantes a Torremolinos en pleno invierno tiene que traducirse en riqueza para todos, siempre y cuando el tejido comercial del municipio sea competitivo.