El tiempo en: Conil
Publicidad Ai
Publicidad Ai

Arcos

Diputación repara la carretera dañada por la crecida del Salado

La obra ha contado con una inversión de 53.000 euros “sin la implicación de la Junta de Andalucía”. El Ayuntamiento sostiene que ahora Consejería de Medio Ambiente debería limpiar el cauce del arroyo

Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
  • Visita institucional. -

La Diputación provincial de Cádiz acaba de finalizar una importante actuación de asfaltado en la carretera que une Arcos y Gibalbín, donde, como consecuencia del desbordamiento del arroyo Salado, se habían producido socavones que incluso llegaron a cortar el tráfico en alguna ocasión el pasado año, afectando a un importante número de usuarios, sobre todo agricultores que tienen sus parcela y su ganado en la zona.


Diputación sostiene que las obras son competencia de la Junta al derivarse de un problema ocasionado por un arroyo. Los trabajos, que han contado con una inversión de 53.000 euros, se han practicado en el alzado de la carretera para impedir en la medida de lo posible nuevos socavones, una vez que la institución provincial ya comprobó el pasado año cómo en época de lluvias la carretera quedaba cortada al tráfico.


Sin embargo, como explica el diputado provincial Bernardo Villar, la Junta no se ha implicado en los trabajos pese a ser de su competencia, máxime cuando hace tan sólo unas semanas anunció una serie de actuaciones precisamente para evitar inundaciones y avenidas de agua como consecuencia del desbordamiento de varios arroyos en la Sierra.  Pero dentro de ese conjunto de actuaciones no se contempló alguna sobre el arroyo Salado. No obstante, a pesar de la intervención de Diputación, el arroyo requiere una limpieza de su cauce para que las aguas, ahora estancadas, sigan su curso natural, según la administración provincial.
Villar enmarcó esta obra en el ámbito de la colaboración institucional, por lo que reclamó la parte que le corresponde a la Junta por responsabilidad. En este sentido, se teme que la Junta pueda echar en cara de algún modo a la Diputación gaditana que la actuación se ha llevado a cabo en una carretera de titularidad provincial.


El alcalde de Arcos, José Luis Núñez, acompañado del delegado municipal de Vías y Obras, Sebastián Ruiz, justificó la actuación provincial con la cantidad de agricultores, fundamentalmente, afectados por la crecida del arroyo, ya que cuando se produce el desbordamiento del Salado tienen problemas para acceder a sus parcelas, como también los ganaderos a la hora de atender el ganado que pasta por los alrededores del arroyo. Núñez piensa que, por una cuestión de solidaridad, el municipio vecino de Espera se podría implicar en solicitar a la Junta que limpie el arroyo que también discurre por su término municipal.


A este respecto, recordó que el alcalde Pedro Romero ha sido también “sufridor” histórico del desbordamiento del arroyo, aunque ciertamente los alzados construidos en los últimos años en distintos puntos de la carretera de Espera han aliviado notablemente la situación, ya que el municipio serrano quedaba en ocasiones incomunicado por la crecida del arroyo.
El regidor arcense también lanzó críticas contra la Consejería de Medio Ambiente, a la que acusó de dar la espalda al municipio pese a haberse aprobado en Pleno en más de una ocasión la instancia a la Junta para que limpie el cauce del arroyo. “La Junta hace caso omiso al Ayuntamiento y, por ende, a los vecinos que son los que sufren las consecuencias”, concluyó el alcalde de Arcos.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN