Personas mayores o con problemas de movilidad podrán hacer uso de la playa del Rinconcillo gracias al servicio que viene prestando desde primeros de julio la delegación municipal de Bienestar Social, que dirige Paula Conesa, en colaboración con Playas, Cruz Roja y las empresas Commanitas y ADL.
El servicio consta de un vehículo colectivo adaptado que ha sido facilitado por Cruz Roja para recoger en sus domicilios a las personas discapacitadas o mayores con problemas de movilidad. Una vez en la playa, voluntarios, tanto de ADL como de Cruz Roja, trasladan a los usuarios a las zonas preparadas específicamente por la delegación de Playas con sillas especiales. El vehículo tiene capacidad para diez usuarios que son seleccionados entre los que atiende el servicio municipal a domicilio que lleva a cabo Commanitas.
Conesa, durante la presentación que se realizó esta mañana del servicio a fin de promoverlo entre los potenciales usuarios, agradeció la colaboración de las empresas que lo están haciendo posible, y resaltó la gran función que está realizando el personal voluntario de Cruz Roja “que está permitiendo que acudan a la playa personas que llevan muchos sin poder hacerlo y que, a veces, viven solas y casi sin salir de sus casas”.
