El Real Madrid volvió a poner en práctica su arsenal de juego para imponerse (115-94) al Dinamo Sassari este miércoles en la cuarta jornada de la fase regular de la Euroliga, celebrada en el Barclaycard Center de la capital española, un duelo en el que los de Pablo Laso impusieron su calidad y fondo de armario para seguir invictos esta temporada a costa del colista del grupo A.
El rival, poderoso en la liga italiana pero con cero victorias en su primera participación en la máxima competición continental, no pudo seguir el ritmo de lo que planteó como un tú a tú con el subcampeón de Europa. Los de blanco fueron marcando la diferencia, con criterio y ataques rápidos, para sumar la cuarta victoria en Europa y seguir creciendo esta temporada en la que comienzan a despegar con un juego coral y alegre.
A pesar de que los locales plasmaron la diferencia pronto en el parqué con un colchón de diez puntos, el cuadro italiano aguantó el tipo hasta el descanso. En la primera mitad, en especial en el segundo cuarto, los de Romeo Sacchetti sacaron a relucir su gran juego exterior, pero con la salida de Sergio Rodríguez en el lado local y un toque de atención en defensa, el juego volvió a ser para los de Laso.
Primero fue Nocioni el que sembró el pánico en el rival. El argentino, junto a Ayón, se hizo fuerte tanto en la anotación como en el rebote para comenzar a marcar las diferencias (21-10) en el primer cuarto. La valentía del campeón de la Supercopa de Italia apretó en parte el marcador, aunque fue un espejismo. El Madrid retomó el mando de la mano del 'Chacho' y al descanso el partido comenzaba a tomar claro color madridista (57-42).
El inicio de la segunda mitad fue un claro ejemplo de la apuesta visitante. Un intercambio de triples entre David Logan, ex del Baskonia y el mejor de los italianos en el Barclaycard Center, y un Llull que templó los ánimos en los visitantes con tres aciertos consecutivos. El balear, asumiendo protagonismo, al igual que K. C. Rivers y Campazzo ante la ausencia de un Rudy Fernández que pasará por quirófano este jueves por su maltrecho dedo, indicó el camino.
El recital de acierto en los de Laso fue imposible de seguir por los italianos, penalizados en cada pérdida, con la ventaja asentada como mínimo en los 20 puntos. Sólo en las últimas acciones, los locales bajaron los brazos después de superar los 112 puntos que endosaron el pasado jueves al Nizhny Novgorod. En cuanto al juego interior, la segunda mitad fue para el incombustible Reyes, aunque tuvo enfrente a un Lawal más que destacable.
Los italianos se fueron con la cabeza alta, anotando 94 puntos en Madrid, con Dyson, Logan y Todic como hombres desatacados. El Madrid aceptó el reto, se olvidó en ocasiones de defender, pero demostró tener poco a poco a todas las piezas a punto. El conjunto madridista sigue así dominando el grupo A de manera invicta, intimidando una semana más al resto de rivales con un baloncesto de altos vuelos.