“En los últimos quince o veinte años hemos vivido un ambiente en España en el que todo el mundo ponía sus energías en su piso y en la construcción, que lo compraba por diez para venderlo por quince, no sólo entre financieros sino en la clase media”, afirma Martínez al recordar cómo surgió la idea de su novela.
Sin embargo, el libro Grúas asesinas (de la editorial Seix Barral) no es, según su autor, “una reflexión sobre el particular ni mucho menos sobre algo que nadie podía prever, que es que todo se fuera al garete como se está yendo”, en referencia a la actual crisis, que no ha sido fuente de inspiración para el autor, puesto que la idea del libro nació hace más de un año.