Ni los más antitaurinos podían imaginarse que su acto vandálico sobre el monumento a Curro Romero terminaría con una brigada de aficionados, capitaneados por el conocido abogado Joaquín Moeckel Gil, infringiendo más daño aún a la estatua al usar un disolvente común para limpiar las pintadas, lo que ha provocado serios daños al bronce, por lo que se ha paralizado la limpieza total hasta que los restauradores no analicen cómo actuar sobre la superficie dañada.
Las pintadas en el monumento al diestro, reiteradas en el tiempo, fueron detectadas el domingo y, tras la inspección, evaluación y valoración económica, la empresa Metis, encargada de la limpieza de grafittis en monumentos, iba a proceder este martes a su limpieza cuando “se encontraron a un grupo de personas, que, subidas al Monumento, estaban procediendo a su “limpieza” sin autorización y con productos industriales inadecuados, identificándose uno de ellos como Joaquín Moeckel Gil”, según el relato municipal.
La empresa comunicó a los técnicos municipales y a la Policía Local los hechos, aunque cuando llegaron los agentes la “brigada” encabezada por Moeckel ya se había marchado del lugar de los hechos, por lo que se ha levantado parte de lo sucedido y, según fuentes municipales, se estudia denunciar los hechos a partir de las fotografías que han estado circulando por las redes sociales en la que aparece el propio letrado y el resto de integrantes del grupo “limpiando” el monumento.
Ante esta actuación, los técnicos han determinado paralizar la limpieza del monumento hasta evaluar los daños que ha provocado la actuación de este grupo, puesto que utilizaron “disolventes de uso común y fácil adquisición, no recomendados en restauración”, ya que pueden provocar en el bronce la pérdida de las pátinas y una reacción química que conlleve la corrosión por presencia de cloruros, tal y como se detectó con el análisis químico realizado en la reciente restauración del Monumento a Miguel de Mañara, “un daño que es, si cabe, aún más grave que el vertido de pintura que se pretendía retirar y que encarece aún más la actuación presupuestada por la Gerencia de Urbanismo”, según aseguran desde el Ayuntamiento.
