Uno de cada cuatro conductores usa el móvil "a menudo" o "siempre" mientras circula, a pesar de que 9 de cada 10 usuarios de moto y coche creen que su uso influye "bastante o mucho" en las probabilidades de sufrir un accidente.
Así lo determina un estudio del RACC donde analiza el uso de los teléfonos móviles en conductores, motoristas y peatones, un trabajo que, además, apunta a que las distracciones no son patrimonio exclusivo de los conductores (26%), sino que también son propias de los peatones (47,2%) y, en menor incidencia, del colectivo motorista (8,7%).
El análisis también constata que una práctica tan peligrosa como escribir un mensaje de texto mientras se conduce un coche es más frecuente de lo que se podría pensar. Concretamente, el 43 por ciento de los conductores.
Estas cifras son superiores a las registradas en el mismo estudio elaborado en 2008. Entonces, el informe 'Las distracciones, el riesgo no percibido' indicaba que un 26 por ciento de los casos utilizan el teléfono móvil "siempre" o "a menudo" en sus desplazamientos, mientras que en el caso de los peatones el porcentaje de uso llega hasta el 47 por ciento.
MENSAJES Y LLAMADAS
Los expertos han señalado que, en el caso de los conductores, un 56 por ciento de las distracciones son consultas al móvil, mientras que en el caso de los peatones, un 36 por ciento son por atender una llamada.
Del mismo modo, el estudio advierte de que los metros recorridos circulando distraídos por ciudad (a 50 kilómetros por hora) escribiendo un mensaje de texto al volante, equivale a circular distraídos como mínimo 20 segundos, es decir, 278 metros. Por carretera, a 120 kilómetros por hora, son 660 los metros de distancia.
Por otra parte, el RACC indica que la mayoría de las distracciones se producen cuando el usuario se desplaza sin acompañante, un 93 por ciento en el caso de un vehículo y un 91 por ciento de los peatones.
RECOMENDACIONES
Con el objetivo de sensibilizar sobre el riesgo de utilizar el móvil en la vía, y reducir así la accidentalidad el RACC propone aumentar la concienciación y promover el uso de aplicaciones de bloqueo del móvil
durante la conducción. Además, pide que se exijan certificaciones para homologar aplicaciones relacionadas con servicio de movilidad como seguras y compatibles con la conducción.
También destaca la necesidad de mejorar el control de las distracciones por parte de las autoridades viales; graduar las sanciones en función de la situación de distracción; implicar a grandes empresas de Internet y operadores en la mejora de las aplicaciones móviles para una integración más segura en la conducción; e introducir un test teórico-práctico en el temario de las autoescuelas para demostrar la afectación de las distracciones en el riesgo de accidente.
