La hermandad de la Misericordia culminó ayer sus cultos eucarísticos con la procesión del Corpus Chiquito. Una procesión potenciada por la nueva junta de gobierno de la hermandad de la Misericordia, que recuperó los cargadores para el Santísimo.
La procesión recorrió las calles Santa Rosalía, Marconi, San Dimas, Santa Cruz, Santo Domingo, Hernán Cortés, Manuel Roldán, Jesús de la Misericordia, San Rafael, Ancha, Manuel Roldán, Colón, Santo Domingo, Marconi y a su templo. Se recuperaba por tanto el antiguo itinerario que llevaba a la procesión hasta la calle San Rafael y que tomaba la calle a la que da nombre el titular.
La banda de música de San José Artesano acompañó el paso de la custodia y en el itinerario, además de los altares y exorno del barrio, destacó una alfombra de sal montada por la asociación de Jóvenes Cargadores Cofrades, que de esta forma se vincula más con la parroquia de la Pastora, en la que porta los pasos de las hermandades de Ecce Homo y Huerto. En el cortejo fueron las hermandades de la parroquia y también la de Soledad, hermanada con la organizadora.
El Corpus Chiquito contó con varias alfombras de sal a lo largo del itinerario y altares que también destacaron en la calle Jesús de la Misericordia, a la que volvía después de muchos años.
El público se volcó con esta procesión tanto en presencia como en respeto en las calles.
