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Sevilla

El exjuez Serrano representará "gratis" a los afectados por la Madrugá

Asevera que "se trata de un acto de terrorismo callejero" con el que "se ha querido sembrar el terror en la ciudad de Sevilla"

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  • Francisco Serrano -

El exjuez de Sevilla y abogado Francisco Serrano ha anunciado este lunes que representará de forma "gratuita" a todas aquellas personas que hayan resultado afectadas por los incidentes registrados en la conocida Madrugá del Viernes Santo sevillano, que se saldaron con ocho personas detenidas, tres de las cuales han ingresado en prisión.

En declaraciones a Europa Press, Serrano, que ejerce actualmente como letrado, ha informado de que ha puesto en marcha una iniciativa para representar "gratis" a los afectados por estos incidentes y personarse como acusación particular, "como perjudicados", en la investigación que dirige el Juzgado de Instrucción número 5 de Sevilla.

"Son muchos los sevillanos que han resultado afectados, ya sea con daños físicos, morales o materiales", ha puesto de manifiesto Francisco Serrano, que fue condenado a dos años de inhabilitación especial para empleo o cargo público a cuenta de un delito de prevaricación culposa por alterar el turno de custodia de un menor para que asistiese a una procesión de la Semana Santa de Sevilla.

Al hilo de ello, ha indicado que su despacho, Serrano Abogados, ha habilitado una cuenta de correo electrónico --denunciasmadruga@despachoserranoabogados.com-- donde se pueden dirigir todas aquellas personas interesadas.


TÚNICAS E INSTRUMENTOS MUSICALES "DESTROZADOS"

En este punto, ha informado de que ya han sido más de 20 personas las que se han puesto en contacto con el despacho como "víctimas" de la Madrugá. "Hay gente que ha llamado porque les destrozaron las túnicas, o los instrumentos musicales, y también por el pánico y el daño moral sufridos", ha precisado.

De este modo, el exjuez Serrano ha abogado por personarse como acusación particular en nombre de los "miles" de afectados a fin de reclamar las responsabilidades penales e indemnizaciones correspondientes contra los sospechosos de haber causado los incidentes en la pasada Madrugá.

"Se trata de un acto de terrorismo callejero, se ha querido sembrar el terror en la ciudad de Sevilla", ha aseverado Francisco Serrano, que ha apuntado que ya existen varios despachos de abogados interesados en colaborar con su iniciativa, como son los de Ernesto Sanguino, Joaquín Moeckel y Fernando Rodríguez Galisteo.


OCHO DETENIDOS

Cabe recordar que el Juzgado en funciones de guardia de detenidos en Sevilla ordenó el pasado viernes el ingreso en prisión provisional de tres de las ocho personas detenidas como consecuencia de los incidentes registrados en la Madrugá.

En concreto, el juez acordó prisión provisional para los tres detenidos que portaban barras metálicas, por los presuntos delitos de desórdenes públicos agravados, tipificados en los artículos 557 y 557 bis 3 del Código Penal, según indicaron a Europa Press fuentes judiciales, que explicaron que las otras cinco personas quedaron en libertad con cargos.

A cuatro de estas cinco personas que han quedado en libertad provisional se les atribuyen presuntos delitos de desórdenes y contra sentimientos religiosos, según las mismas fuentes.

Por otro lado, al restante de esos cinco detenidos ahora en libertad con cargos, de origen senegalés, se le atribuye un supuesto delito contra los sentimientos religiosos del artículo 523 del Código Penal.


"ALÁ ES GRANDE"

La Fiscalía ha calificado su actuación como constitutiva de un delito contra los sentimientos religiosos del artículo 523 del Código Penal por el que ha interesado para él una pena de cuatro meses de multa a razón de seis euros diarios.

Según el Ministerio Público, este hombre, identificado como P.M.D., con ocasión de la salida procesional de la hermandad de la Esperanza de Triana, y cuando circulaba por la calle Reyes Católicos, "con intención de alterar el normal desarrollo de la procesión, empezó a gritar a la comitiva cuando pasaba el paso de misterio 'Alá es grande', manifestaciones que repitió en multitud de veces", generando "el lógico desasosiego a los cofrades y al público en general".

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