Un jurado popular ha declarado culpable al hombre acusado de matar a una mujer en Pilas (Sevilla) después de intentar violarla, hechos por los que la Fiscalía y la acusación particular solicitan una condena de prisión permanente revisable.
Los miembros del jurado han considerado probado por unanimidad que E.R.R. mató a A.M.M. "consciente e intencionadamente" el 12 de marzo del 2007 "al seccionarle la yugular y la tráquea sin que ella pudiera defenderse", ya que "la atacó por sorpresa mientras ella estaba desprevenida".
El veredicto, pronunciado este martes en la Audiencia Provincial de Sevilla, también establece como probado que el acusado golpeó y pinchó "repetidas veces" a su víctima con un arma blanca, lo cual provocó "un sufrimiento innecesario" a la mujer, a la que "abordó con intención de mantener relaciones sexuales con ella".
E.R.R. "la obligó a despojarse de la camiseta y le bajó los pantalones y las mallas" y a continuación "la mató para evitar que ella lo denunciara y después de constatar que no podía satisfacer su propósito sexual", ha añadido el jurado, que admite la atenuante del "retraso mental ligero" que padece el acusado, así como que "estaba bajo la influencia del alcohol y la cocaína que había consumido durante la noche anterior", por lo que "tenía levemente mermada la capacidad para controlar sus impulsos".
El jurado popular también desaconseja que se proponga el indulto parcial o total para E.R.R., quien a lo largo del juicio argumentó que el crimen había sido cometido por el marido de la víctima y una amante.
Tras oír el veredicto, la fiscal ha rechazado las atenuantes y ha mantenido su petición de prisión permanente revisable por el asesinato porque "si bien es la más grave, también es la adecuada", así como la solicitud de 9 años de cárcel por el delito de agresión sexual en grado de tentativa y el pago de una indemnización de 254.880 euros al marido y los dos hijos de la fallecida.
En cuanto a la acusación particular, se ha adherido a la petición de prisión permanente revisable y ha insistido en reclamar una condena de 12 años de cárcel por la agresión sexual, mientras que la defensa ha repetido la tesis de la absolución y, con carácter subsidiario, la pena mínima posible por un delito de homicidio.
