La NASA ha incorporado las naves Starship de Space X y Bluemoon de Blue Origin, entre cinco nuevas propuestas privadas de aterrizadores lunares para unirse a su Programa Artemisa.
Unidas a Sierra Nevada Corp., Ceres Robotics y Tyvak Nano-Satellite Systems, las cinco compañías ahora pueden competir para entregar cargas robóticas a la superficie lunar para la NASA, lo que ayuda a allanar el camino para el regreso de los astronautas a la luna en 2024.
Las cinco compañías se unen a otras nueve seleccionadas por el CLPS (Commercial Lunar Payload Services) en noviembre de 2018, lo que eleva el número total de aspirantes privados al aterrizaje lunar a 14 empresas, según la NASA.
Incluyen conceptos de alunizaje de todos los tamaños. Van desde el verdaderamente masivo --el imponente vehículo Starship de SpaceX--, hasta aterrizar múltiples vehículos en la luna, pasando por las sondas únicas más pequeñas como el concepto propuesto por Tyvak Nano-Satellite Systems.
El concepto de aterrizaje de Blue Origin se basa en su vehículo no tripulado Blue Moon, que el multimillonario fundador de la compañía Jeff Bezos anunció a principios de este año.
Sierra Nevada Corp. y Ceres Robotics están desarrollando naves robóticas de tamaño medio que podrían ampliarse a vehículos más grandes en el futuro.
La NASA planea usar alunizadores privados construidos por estas compañías asociadas para el transporte de vehículos como el nuevo VIPER al polo sur de la luna. Otras cargas útiles podrían incluir centrales eléctricas, experimentos científicos y otra infraestructura lunar.
En julio, la NASA otorgó los primeros tres contratos bajo el programa, otorgando misiones de aterrizaje a las compañías Astrobotic, Intuitive Machines y Orbit Beyond. Orbit Beyond se retiró de ese contrato, pero sigue siendo elegible para ofertar en futuras oportunidades.
Artemisa tiene como objetivo poner a la primera mujer y al siguiente hombre en la superficie lunar para 2024 y establecer una presencia humana sostenible a largo plazo en y alrededor de la luna para 2028.
La NASA también está buscando que el sector privado desarrolle aterrizadores lunares tripulados. En mayo pasado, la agencia seleccionó a 11 compañías para realizar estudios y construir prototipos. Estos 11 tenían hasta el 1 de noviembre para presentar propuestas detalladas para el módulo de aterrizaje humano Artemis, y se espera que la NASA recoja a cuatro finalistas a principios del próximo año, informa Space.com.