Interesantísimo partido el que se vio el domingo en el Antonio Gallardo con la visita de la A.D. Ceuta a Arcos, uno de los equipos del grupo décimo llamados, como cada temporada, a disputar las eliminatorias de ascenso a Segunda B. Con uno de los entrenadores más reputados de la categoría, José Juan Romero, que encumbró a su C.D. Gerena al olimpo del fútbol aficionado ganándose el apelativo del “Guardiola” de la Tercera División, lo que le valió para recalar posteriormente en el organigrama técnico del Real Betis Balompié, la A.D. Ceuta tiene la facultad de fichar jugadores a golpe de tarjetazo y cada año se hace con lo mejorcito de la Tercera y parte de la Segunda B, como volvió a demostrar el domingo con la presencia de futbolistas como David Hinojosa, Alberto Reina, Pablo García, David Castro, Rafa Melo o Borja Jiménez, por poner solo una muestra de su enorme potencial deportivo y económico.
El arcense Hinojosa, otrora en las filas del Betis Deportivo y del Cádiz B, dio un curso de cómo dirigir a su equipo desde su puesto de medio centro, aportando fluidez y dinamismo en sus acciones y ayudando en tareas menos lucidas a sus compañeros, que lo buscaban en todo momento. Los piropos de su entrenador en la rueda de prensa posterior al partido son un claro ejemplo de la sintonía que hay entre técnico y futbolista.
En cuanto al Arcos, se fajó de lo lindo a lo largo del choque sin perderle la cara a su poderoso rival, pero los planes previstos de antemano por Bolli se empezaron a torcer con la inesperada lesión en el min. 22 de su segunda punta Pablo Rodríguez, lo que acrecentó el dominio de los caballas, que pudieron hacer más daño en sus acciones ofensivas, pero en la reanudación volvió a encorajinarse para poner en aprietos a los norteafricanos, que terminaron el choque con uno menos y pidiendo la hora.