Así, en un comunicado el Ayuntamiento se lamenta de que “los representantes de la Plataforma no hayan pedido, en ningún momento desde que hace meses se inició el proceso, una reunión con ningún miembro del equipo de Gobierno”, añadiendo que tampoco lo han pedido al Área de Urbanismo “con el fin de establecer un diálogo sobre el texto que recogen las Ordenanzas e intentar a todos los acuerdos que sobre ellas fueran posible”.
Diálogo
Esto queda reforzado con las palabras que ayer por la mañana esgrimía el alcalde, José María Román, mostrando un talante para el diálogo y haciendo suya la ya manida frase “hablando se entiende la gente”. Custodiado por Nadine Fernández y Mª Ángeles Polanco, el primer edil ha tendido la mano “a toda aquella persona o plataforma que desee se le facilite información del proceso de regularización y quiere aportar sus pareceres sobre el mismo”. La idea, según el propio equipo de Gobierno, es recibirlos con la máxima celeridad posible ya que “hasta el momento, el Gobierno, después de numerosas reuniones con personas y colectivos implicados en este proceso, ha atendido la mayoría de las peticiones, y ha aumentado las ventajas para participar en la iniciativa”. Las reformas han sido varias, como anular los plazos para poner en marcha los servicios (que se pretendía hacer en tres años); realizar los recibos fraccionados “para que el pago se pueda hacer más cómodo”; o la disminución de las cantidades para pagar el mínimo posible.
Cordialmente el equipo de Gobierno se ha dirigido a los partidos de la oposición (PP, PA y al concejal José Pedro Butrón) tildándoles de “embusteros” por intentar “engañar a los vecinos diciéndoles cosas totalmente diferentes, con fines electorales, que las acciones que pretendían llevar a cabo” cuando gobernaban. Ya que, en palabras del Gobierno, “tenían la intención de poner en marcha unas Ordenanzas mucho más duras para este tipo de viviendas que obligarían a los vecinos a pagar más dinero por los servicios y a hacerlo en menos plazos”.
Desde el Consistorio se hace especial hincapié en la negativa a dialogar de la oposición, sobre el proceso de legalización junto al equipo de gobierno “haciendo gala de una postura inflexible e intolerante”.
Justicia para unas Ordenanzas "irreales"
El portavoz del grupo municipal andalucista, Manuel Guerrero, ha expresado su satisfacción por el “éxito” de la manifestación, felicitando “a todos los ciudadanos que han pidieron justicia ante unas ordenanzas irreales”. Asimismo, considera que no tienen el consenso político ni ciudadano. Por su parte, el Partido Popular calificó a Román de “alcalde sin escrúpulos”, ya que “Román y el PSOE se están empeñando en enfrentar a la ciudad con las AGB”. Según afirman desde el PP, “en ningún momento nadie ha hablado de que se pague parte del proceso con los impuestos, ni que los no afectados”. También se manifestó la plataforma ciudadana ‘Chiclana Justa’ quien han expresado que “no niegan que tengan que afrontar el pago total de los costes de la regularización de sus viviendas equilibrada y justa”.