Un auto del Juzgado de Instrucción número 15 de Sevilla ha archivado la denuncia presentada por la decana del Colegio Oficial de Arquitectos de Sevilla (COAS), Cristina Murillo, contra el anterior equipo directivo por una supuesta manipulación de actas.
La resolución judicial hace suyo el informe del Ministerio Fiscal, que considera que tras la denuncia hay “motivos espurios” de la dirección actual para “obtener una ventaja” en el juicio por el despido del director técnico del Colegio, que se produjo al poco tiempo de la toma de posesión de Cristina Murillo.
La jueza considera que no se han acreditado las acusaciones de falsedad documental y delito informático que formalizó la máxima representante de los arquitectos sevillanos tras ganar las elecciones de 2017. La decana declaró en sede judicial que durante los mandatos de su antecesor en el cargo, Ángel Díaz del Río, se manipularon los libros de actas, se cambiaron fechas de los registros de salida y entrada de documentos, y se eliminaron expedientes. Sin embargo, la jueza concluye que no existen indicios que justifiquen la continuación de la investigación de ningún ilícito penal, y por tanto ordena su sobreseimiento.
El auto rechaza que el informe pericial y la auditoría encargados por la decana del COAS aporten pruebas que sostengan su acusación, y en contraposición dice que la declaración de los denunciados y testigos fueron “coherentes” y aportaron “razones justificadas y cumplidas explicaciones” de cada uno de los hechos investigados. Aunque define el sistema informático como obsoleto, estima que “no hay evidencia de alteración” en ningún documento registrado digital o manualmente.
La jueza reproduce en el auto la consideración del Ministerio Fiscal de que los denunciantes “han pretendido la formación de una causa prospectiva respecto a la gestión de la anterior Junta de Gobierno”, y cree que el objetivo es “obtener una ventaja” en la causa pendiente contra Cristina Murillo y su equipo por el despido de quien fuera director técnico del Colegio, juicio que lleva cuatro años aplazado por ser éste uno de los acusados en la denuncia que acaba de archivarse.
Éste es el tercer varapalo judicial a la actual dirección del Colegio de Arquitectos de Sevilla en lo que va de año. Hace unas semanas una jueza anuló las elecciones del COAS, al constatar que se incumplieron los estatutos de esta institución en lo relativo al voto por correo, decisión que deja en funciones a la Junta de Gobierno, a la que se ordena repetir los comicios. Y el pasado mes de abril se archivó la denuncia de Cristina Murillo contra Díaz del Río y su equipo por la gestión de la Fundación para la Investigación y Difusión de la Arquitectura en Sevilla (FIDAS), y el auto reprochó a la decana que no hubiera presentado pruebas de sus graves acusaciones y que realizara “meras suposiciones” para “sembrar dudas” sobre etapas anteriores.
