Tras el repunte experimentado durante el primer tramo de la semana pasada, la incidencia a siete días, la que marca la evolución de la epidemia a más corto plazo, vuelve a caer claramente en el arranque de esta semana en Alcalá, hasta situarse en 50,7. Aunque la tendencia a la baja es generalizada en toda la provincia, y las diferencias son pequeñas, en estos momentos en estos momentos el indicador de Alcalá la Real es el segundo más bajo entre los municipios más poblados de Jaén, solo por detrás de Úbeda (49,5), y por delante de Andújar (54,6), Jaén (72,7) ), Martos (98,6) y Linares (109,8).
Por lo que respecta a la incidencia a 14 días, esta se sitúa en 152, lo que representa nueve puntos menos que el viernes, tras sumarse cuatro positivos durante el fin de semana. La bajada es continuada, aunque parece frenarse en relación con el ritmo de las jornadas precedentes, y sobre todo teniendo en cuenta que acumula datos de tres días. No en vano, el viernes bajo 23 puntos, el jueves, 18 y el miércoles, 60.
Un dato muy positivo es el de las personas que dejan atrás la cuarentena o han superado la enfermedad durante el fin de semana. Son en total 28, lo que lleva a reducir el número de casos activos a 105, lo que supone la cifra más baja desde finales del pasado mes de julio.
Con la única excepción de Frailes, donde la incidencia se mantiene entre las más altas de la provincia, con 883, aunque hay que relativizar su importancia por su pequeño tamaño, la comarca sigue presentando una buena evolución. Castillo de Locubín baja su incidencia a 148 y Alcaudete a 47. En el conjunto del distrito sanitario, la tasa es de 182.