La Policía Nacional ha detenido a 24 personas en las provincias de Murcia y Alicante al desmantelar una banda que cobraba a inmigrantes entre 6.000 y 8.000 euros para regularizar su situación en España y que tenían que trabajar al menos diez horas diarias en esas provincias y en Almería, mientras la empresa declaraba un 85 % menos de los días trabajados ante la Seguridad Social.

Según la Policía, los detenidos se aprovechaban de la situación de necesidad y vulnerabilidad en la que se encontraban numerosos inmigrantes -hay al menos 30 víctimas- y que, por ello, se les imputan delitos contra el derecho de los trabajadores, contra el derecho de los ciudadanos extranjeros, contra la hacienda pública y también de falsedad documental.

La investigación se inició a principios de año por la Comisaría de Policía Nacional de Elche al tener conocimiento de la existencia de una red dedicada a la explotación laboral de ciudadanos extranjeros en situación irregular, a quienes sometían como jornaleros en la recogida de fruta por diferentes puntos de las provincias de Alicante, Murcia y Almería.

A largo de la investigación, los agentes de la Policía Nacional detectaron la actuación de una organización criminal que utilizaba una empresa pantalla de trabajo temporal para dar apariencia de legalidad a la explotación de los trabajadores irregulares, aprovechándose del estado de necesidad de los mismos y "sometiéndoles a jornadas laborales maratonianas".

La red criminal utilizaba varios modos para defraudar a Hacienda: daba de alta a trabajadores en situación irregular, contrataba a trabajadores que no realizaban ningún tipo de actividad laboral y que ni siquiera se encontraban en España e incluso cambiaba identidades entre trabajadores con el fin de contratar y beneficiar de las prestaciones de la Seguridad Social a quien más interesaba.

Según asegura la Policía Nacional, los principales responsables de la organización criminal cobraban entre 6.000 y 8.000 euros a quienes regularizaban de forma fraudulenta a través de la red de empresas con las que operaban, con tal de que cada trabajador pudiera beneficiarse del acceso a diferentes ayudas sociales tales como prestación por desempleo o maternidad.

Asimismo, el cuerpo policial ha sostenido que defraudaban presuntamente a la Seguridad Social, dado que declaraban hasta un 85 % menos de los días cotizados por parte de trabajadores contratados, los cuales realizaban jornadas de un mínimo de diez horas.

La Policía Nacional de Elche, en colaboración con los agentes murcianos, establecieron en Albatera (Alicante) y Murcia sendos dispositivos policiales simultáneos para la localización e interceptación de furgonetas integradas por trabajadores extranjeros irregulares relacionadas con la empresa de trabajo temporal.

Los agentes llegaron a interceptar hasta nueve furgonetas de trabajadores irregulares, en las que, entre todos los ocupantes, se consiguieron identificar a más de treinta personas extranjeras en situación irregular en España, aunque la Policía Nacional continúa buscando más víctimas.