El alcalde de Almería, Ramón Fernández-Pacheco (PP), ha abogado por que el partido celebre los próximos días 20 y 21 de julio un "congreso de unidad" al que finalmente concurra una "lista única" abanderada por la exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría que sea "integradora", de modo que en ella se vean representadas "todas las sensibilidades".
Así lo ha manifestado el alcalde en unas declaraciones este sábado al hilo del resultado de la votación de la militancia del PP del pasado jueves para elegir al próximo presidente nacional del partido, la figura que releve a Mariano Rajoy en el congreso extraordinario que la formación celebrará dentro de dos semanas. Dicha votación se saldó con una victoria de Sáenz de Santamaría por alrededor de 1.500 votos de diferencia respecto al segundo precandidato más votado, Pablo Casado.
Fernández-Pacheco ha reconocido el "magnífico resultado" de Casado, pero considera que el partido debería "aplicarse" su "máxima" del "respeto a la lista más votada, algo que le exigimos siempre al resto de partidos", según ha remarcado.
En ese sentido, el alcalde ha señalado que "los militantes, los afiliados, han hablado de forma clara" en la votación del pasado jueves, "y han dicho que quieren que Soraya Sáenz de Santamaría sea la próxima presidenta" del PP.
Para Fernández-Pacheco, "lo deseable sería un congreso de unidad en el que Soraya Sáenz de Santamaría sea capaz de integrar no sólo a la lista de Pablo Casado, sino también al resto de equipos" que han concurrido este proceso. A su juicio, "eso nos hará ser más fuertes", permitirá a los 'populares' "salir más unidos y nos dará más garantías para poder cosechar éxitos electorales cuando llegue el momento".
"Estoy convencido de que ese debe ser el camino" y "lo deseable es una lista única, integradora, en el que todas las sensibilidades se vean representadas", ha insistido el alcalde almeriense, para quien "el PP ha dado una lección de que se pueden celebrar primarias con total normalidad en un ambiente de compañerismo, sin ningún problema", y ha demostrado además "que las primarias no son patrimonio de la izquierda en absoluto", según ha abundado.