Uno de los principales testigos en la causa contra el hombre que se enfrenta a nueve años y medio de prisión por presuntamente intentar matar hace catorce años a pedradas a su pareja durante una discusión en Roquetas de Mar (Almería) ha asegurado hoy ante la Audiencia Provincial de Almería que la agresión "fue una brutalidad".

"Estaba de vacaciones, sobre las cinco de la mañana o así me iba a dormir. Me iba a meter en la cama del hotel cuando escuché golpes y gritos. Subí rápido la persiana, me asomé y vi a una chica tumbada y al agresor, al que desde arriba sólo veía parte de la nuca, golpeándola", ha relatado el testigo ante los magistrados de la Sección Segunda.

El hombre ha explicado que bajó a la calle y allí se encontró a la mujer "con la cara desfigurada, agonizando" y que cerca de ella había piedras llenas de sangre. "Le tuve que quitar la camiseta, que estaba llena de sangre, y se la puse en la nuca, como me dijeron los de la ambulancia. Me impactó muchísimo, fue una brutalidad", dice.

También han declarado, entre otros, los peritos médicos que estudiaron las lesiones de la víctima, "muy considerables a nivel craneal, cráneo encefálico y facial", ya que presentaba una "fractura múltiple del esqueleto óseo craneal" con pérdida de líquido cefalorraquídeo, heridas de "riesgo vital" que hubiesen provocado la "muerte súbita" de la mujer de no haber sido atendida.

Preso en Alemania por otra causa, el acusado se ha negado a declarar por videoconferencia, pese a que contaba con una intérprete de alemán en el país germano y otra de árabe en Almería. De hecho, ha tenido que ser expulsado de la sala en Alemania debido a que durante unos 20 minutos la vista ha sido interrumpida por el reo, ya que no dejaba de interrumpir las declaraciones.

Además, han declarado esta mañana un policía local y guardias civiles que intervinieron en el caso, una amiga de la víctima y se ha dado lectura a la declaración de la agredida, tras lo que fiscal, acusación particular y defensa han elevado a definitivas sus conclusiones.

La calificación del fiscal, a la que ha tenido acceso Efe, señala que los supuestos hechos tuvieron lugar durante la madrugada del 3 de julio de 2006 en la avenida Carlos III de Aguadulce, en Roquetas de Mar.

El hombre se encontraba allí con su pareja y se inició una discusión entre ambos, en el transcurso de la cual el acusado la habría tirado al suelo y golpeado en "numerosas ocasiones" con una piedra en la cabeza y la cara con "intención de acabar con su vida".

Según el fiscal, el hombre, de origen marroquí, no paró hasta que una persona hospedada en un hostal cercano escuchó los gritos de la víctima y le llamó la atención para que la dejara. Fue entonces cuando presuntamente arrojó la piedra que había usado y huyó.

Tras esto llegó al lugar el 061, ya que varias personas habían avisado a este servicio de emergencias, cuyos sanitarios trasladaron a la víctima hasta el hospital, dónde se pudo "salvar su vida con la asistencia médica prestada".

Por estos presuntos hechos, el fiscal solicita nueve años y medio de prisión por un delito de homicidio en grado de tentativa, por el que también interesa que se prohíba al acusado comunicarse o aproximarse a menos de 500 metros de la víctima durante 19 años.

Por último, pide que indemnice a la mujer con 3.690 euros por días de hospitalización; 1.140 por el resto de días que estuvo incapacitada; 60.000 euros por las secuelas y 40.000 euros por el perjuicio estético.