El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado este lunes el plan de gestión para las pesquerías de cerco en el subcaladero mediterráneo.
El plan afecta a los barcos que faenan desde la Punta de Tarifa a la frontera con Francia, tanto en aguas jurisdiccionales españolas como en la zona de protección pesquera en el mar Mediterráneo, y en alta mar por fuera de las aguas jurisdiccionales de los demás países ribereños, según se detalla en el texto.
Las principales poblaciones objetivo susceptibles de ser capturadas con los artes de cerco son, de acuerdo al plan de gestión, la sardina (Sardina pilchardus) y el boquerón (Engraulis encrasicolus), que se encuentren "dentro de unos límites biológicos seguros" y "explotadas de forma sostenible".
Además, queda prohibido el uso de redes de cerco en fondos inferiores a 35 metros; a menos de 450 metros de distancia a la costa, la prohibición se amplía a fondos inferiores a 50 metros.
La pesquería de cebo vivo únicamente podrá practicarse como auxiliar de la de túnidos y, por lo tanto, exclusivamente por los buques autorizados para la pesca de túnidos con cañas y cebo vivo, según el texto.
Se especifican también las 19 especies autorizadas principales para su captura con arte de cerco y que sólo entre los días 15 de julio y 15 de noviembre de cada año podrá pescarse calamar, dorada o palometa blanca.
Entre el 1 de agosto y el 15 de noviembre de cada año podrá capturarse la especie denominada seriola, lecha o serviola (Seriola dumerili).
Según el documento, la talla mínima del boquerón se fija en 10 centímetros y la de la sardina en 12.
