La economía española sigue creciendo. Previsiones de organismos internacionales como la Comisión Europea, la OCDE o el FMI coinciden en señalar alzas de en torno al 2% para este año o el siguiente, lo que traerá aparejado un crecimiento paralelo del mercado laboral.
La FP sigue mejorando su prestigio y aceptación en nuestro país, gracias a su capacidad diferencial a la hora de acercar la formación a las necesidades laborales de las empresas, haciéndolo, además, de una forma flexible, rápida y eficiente"Ese crecimiento, no obstante, tendrá un comportamientodiferenciado dependiendo del sector analizado y que impactará de modo desigual según el perfil profesional estudiado.
Según el informe anual del Observatorio de la FP de CaixaBank Dualiza, desde 2023 a 2030 se generarán casi ocho millones de oportunidades de empleo en el país, de las que una cuarta parte, casi dos millones, serán para técnicos de FP.
Ese aumento vendrá impulsado fundamentalmente por dos sectores, el del comercio-una categoría que incluye también elmantenimiento de vehículos, según la Clasificación Nacional de Actividades y Económicas- y el de la Industria manufacturera. Dos pilares de nuestra economía donde la figura de la FP es y será imprescindible.
Solo entre estos dos sectores se repartirán una de cada cuatro oportunidades de empleo.
La mayor parte de ellas serán oportunidades de reemplazo, puestos de trabajo donde la persona que lo desarrolla se jubila y otro pasa a ocupar la plaza, mientras que una mínima parte será de nueva creación.
De hecho, según el FPAnálisis del mes de enero, elaborado por el Centro de Conocimiento e Innovación de CaixaBank Dualiza con la colaboración de Orkestra, casi una de cada tres personas en edad de trabajar pasará a la jubilación en poco más de una década.
Esa salida de trabajadores obliga a anticiparse en la formación de los nuevos perfiles para evitar que tenga una incidencia en el mercado laboral.
Nuevos trabajadores que entrarán en un mercado condicionado por tres vectores, el de la propia demografía, el de la sostenibilidad y el de la digitalización, que impactarán de lleno en cada uno de los procesos productivos de laeconomía obligando a cambiar los modos actuales de trabajo. No habrá una parte que se encargue de la sostenibilidad, sino que todos los procesos tendrán que ser sostenibles, al igual que la digitalización no será un aspecto a tener en cuenta, sino que todo será digital.
Ese camino es un procesoya iniciado y acelerado a raíz de la pandemia, que obligará también a una recualificación de muchos trabajadores y a la adquisiciónde nuevas competencias por parte demuchos otros.
Según refleja el estudio “Cambios en los perfiles profesionales y necesidades de FP en España. Perspectiva 2030” los profesionales reformarán sus perfiles para avanzar hacia un perfil híbrido con un conocimiento genérico más amplio, más especialización, mayor capacidad de gestión de información especializada y mayor responsabilidad a la hora de tomar decisiones.
Ese nuevo modelo sustituirá al anterior, un modelo industrial de cualificación. Sin embargo, su institucionalización llevará un tiempo y está previsto que se complete a medio plazo.
Una de sus principales características será la tendencia a la intelectualización del trabajo, en el sentido de que cada vez se requerirán más competencias relacionadas con los procedimientos mentales de análisis, planificación, toma de decisiones… es decir, las denominadas competencias transversales, blandas o softskills, por su denominación anglófona.
Un nuevo escenario que requiere una nueva aproximación social, que incorpore el trabajo conjunto de todos los actores implicados, así como un compromiso formativo en el que las empresas han de dar un paso adelante.
En ese proceso de concienciación y formación se encuentra CaixaBank Dualiza, que ejerce de puente entre empresas y centros educativos, con el objetivo de acercar dos realidades que se necesitan aunque en muchas ocasiones se desconozcan.
A través de diversas actividades, trata de impulsar la FP y su modalidad dual subrayando las ventajas que su impulso conlleva para todos los participantes en la misma: un acercamiento del centro a la empresa y, por tanto, a las últimas novedades tecnológicas con las que trabaja la industria, a las que el mundo educativo no puede acceder por falta de presupuesto; un acercamiento de la empresa al centro y la posibilidad de contribuir en la formación del talento del que se nutrirá mañana, y una mejora formativa del estudiante que ve desde el primer momento la aplicación práctica de los contenidos teóricos que aprende en el aula y anticipa su entrada al mercado laboral obligándole a madurar de un modo más rápido.
Esa colaboración cobra pleno sentido en iniciativas como la Convocatoria de Ayudas Dualiza en la que CaixaBank Dualiza selecciona las iniciativas más innovadoras planteadas por centros educativos de la mano de empresas, y desarrolladas por estudiantes con el objetivo de mejorar el aprendizaje de estos y, por tanto, su inserción en el mercado laboral.
Todas estas actuacionesse llevan a cabo para adelantarse en la formación de los profesionales del mañana,en lo que supone un compromiso con el futuro de la educación, del mercado laboral y, en definitiva, de la sociedad.
El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, destaca que “la FP sigue mejorando su prestigio y aceptación en nuestro país, gracias a su capacidad diferencial a la hora de acercar la formación a las necesidades laborales de las empresas, haciéndolo, además, de una forma flexible, rápida y eficiente”.
Por su parte, el consejero delegado de la entidad, Gonzalo Gortázar, considera que "el impulso de la FP sigue siendo una tarea fundamental para nuestra sociedad ya que de aquí a 2030 habrá dos millones de oportunidades para técnicos de FP y casi 100.000 de ellas podrían quedar vacantes por la falta de profesionales con las competencias adecuadas".