Emasesa, la empresa metropolitana de aguas, ha asegurado que el
trasvase de la depuradora de San Jerónimo a la de Copero se ha realizado “
siguiendo criterios técnicos y atendiendo a los condicionantes de explotación del Emisario Puerto”, apuntando que se ha gestionado “
de manera coordinada con la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG)
y la Junta de Andalucía y
garantizando el cumplimiento en materia de Prevención de Riesgos Laborales y de Seguridad y Salud de todos los trabajadores”.
La empresa sale así al paso de las críticas de la
CHG, que aseguraba que se había puesto en
riesgo la estabilidad de las obras y en peligro a la plantilla, asegurando que en la
reunión del 4 de diciembre con el equipo de la Confederación en la que se
abordaron los plazos para el cierre de la depuradora “se detectó que había una
única afección posible en esta intervención, entre la
calle Santiago Montoto y el inicio de la Avenida de la Raza”, extremo que se acordó resolver “con las
medidas de seguridad de la obra, devolviendo a dicho tramo una
situación incluso mejor a la que presentaba durante el último año, aun contando con los
caudales trasvasados desde la EDAR San Jerónimo”.
Según asegura Emasesa, con este cierre lo que se ha iniciado es el
plan de concentración de vertidos, que aprobó la empresa en 2009, y “obedece a la adecuación de los vertidos al entorno de Doñana y a las nuevas exigencias normativas que garantizan un tratamiento seguro y eficiente de las aguas residuales procedentes, entre otros, de Alcalá del Río, La Rinconada y la zona norte de Sevilla”.
“Además, este cierre tiene un
impacto económico positivo para la ciudadanía, ya que el
canon anual de vertido de la Confederación hidrográfica del Guadalquivir, que asciende a
1.165.465 euros, dejara de abonarse a partir del día el 1 de enero de 2025”, resaltan sobre el ahorro que supone la medida.
Con el objetivo de
adecuar los vertidos de Sevilla a las condiciones exigidas por la declaración de Zonas Sensibles, en 2009 se diseñó una
remodelación del sistema de saneamiento y depuración del área metropolitana de Sevilla, para cuya implementación se procedió al desarrollo de
dos convenios, uno con la
Junta de Andalucía por importe de 128,5 millones de euros, y otro con la
Confederación Hidrográfica del Guadalquivir por importe de
93,5 millones de euros, que contemplan en conjunto la ejecución de
un total de 13 proyectos, explican.
“Después de más de
3 años de esfuerzos de coordinación y colaboración entre las administraciones central, autonómica y local para la consecución de los objetivos ambientales recogidos en los convenios que materializan las inversiones necesarias para la adecuación de los vertidos al entorno de Doñana,
es impensable que ninguna de ellas pretenda poner en peligro el éxito de la operación”, argumentan.
“La
desconexión de la depuradora de San Jerónimo debe entenderse como un
avance en tal objetivo, y no como una amenaza y todas las administraciones debemos coordinarnos para ello”, concluyen.