El coordinador general de IULV-CA, Antonio Maíllo, ha urgido al nuevo Gobierno andaluz nombrado por Susana Díaz a "ponerse a trabajar cuanto antes", especialmente en materia legislativa para que las leyes previstas en el acuerdo con el PSOE-A puedan "entrar en vigor antes del final de la legislatura", porque considera "quizá ha durado demasiado todo el proceso de cambios en la otra parte del gobierno".

   Maíllo se ha pronunciado de este modo durante una entrevista en Canal Sur Radio, recogida por Europa Press, en la que ha insistido en que "se acabe cuanto antes todo el proceso protocolario porque no hay tiempo que perder y es momento de ponerse en marcha ya para empezar a ejecutar las políticas que todavía no se han hecho y de iniciar este nuevo curso político, crucial para que las leyes puedan desarrollarse y entrar en vigor antes del final de la legislatura".

   En este sentido, el líder andaluz de IU ha recordado que, "aunque sea un gobierno nuevo no es un acuerdo nuevo", por lo que ha subrayado la necesidad de "ponerse en marcha" porque considera que "quizá ha durado demasiado todo este proceso de cambios en la otra parte del gobierno, que si primarias, que si dimito o no dimito, que si renuncia el presidente y se nombra uno nuevo y ahora nuevas caras de consejeros". "Les deseo toda la suerte del mundo, pero que se pongan a trabajar", ha recalcado.

   Maíllo no ha querido entrar a valorar los perfiles de los nuevos miembros del Ejecutivo, aunque ha destacado que "algunos de ellos por su trayectoria tienen bastante solvencia", y ha preferido desearles que "tengan suerte en el ejercicio de sus funciones, lo hagan bien y se concentren con un espíritu de cercanía, complicidad con la ciudadanía y mucha transaparencia".

   En su opinión, la prioridad debe ser "poner en marcha todas las iniciativas que tenemos pendientes de abordar y que fueron planteadas por los portavoces en el debate de investidura, como la banca pública,  el banco de tierras o una fiscalidad progresiva para visualizar que existe una salida a la crisis diferente a la que nos quieren imponer desde Madrid".