La humedad de la Casa de Hermandad daña enseres y el manto de la Virgen

Los hermanos de la Insigne y Real Congregación del Santo Sepulcro y Siervos de Nuestra Señora de los Dolores manifiestan su "malestar" antes las "lamentables" condiciones en las que se encuentra la Casa de Hermandad. 

Sita en un bajo de la calle Los Caños, los cofrades llevan sufriendo las situaciones de humedad de las instalaciones desde hace "muchos años". Así lo explicaba el Gobernador de la Congregación, Víctor García, que asegura que "es un problema del bloque de viviendas, que cuenta con un patio de luz al que nadie tiene acceso y que no se puede limpiar después de las lluvias". 

Las condiciones climatológicas de este invierno han agravado la situación. Tal es así que numerosos enseres de la Congregación del Santo Sepulcro han sufrido daños. Entre otros, el manto de color negro y bordado en oro que lucirá el próximo Viernes Santo Nuestra Señora de los Dolores, que ha sido uno de los que no ha resistido las condiciones de la Casa de Hermandad. "Es un manto que tiene ya más de cien años y el tiempo ha dado lugar a que se estropee, pero con las condiciones de humedad, el terciopelo de la parte más baja ha sufrido daños", comentaba el Gobernador. 

Una de las zonas más afectadas es la pared donde está ubicado el armario donde guardan la mayoría de los enseres. La parte trasera del mismo ha sufrido los problemas de humedad y ha calado en el interior, provocando así los daños en la conservación. En varias ocasiones se ha intervenido en la zona, pero "el deterioro es considerable", recordaba el gobernador. 

Hasta el momento, esperan la respuesta de los vecinos de la calle, después de haberles remitido, en repetidas ocasiones, cartas donde la Junta de gobierno explicaba el problema. "Es una Casa de Hermandad en la que ya no nos podemos reunir por el frío que se pasa en ella, por lo que cuando tenemos que tratar algún tema relacionado con la Cofradía nos juntamos en el despacho de algún cofrade, e incluso hemos tenido que hablar en un bar", continuaba García. 

Y es que el principal problema al que se enfrentan es al económico. “La Cofradía no tiene dinero suficiente, al contar con 500 cofrades y algunos que no pagan la cuota, de afrontar la mejora de la Casa de Hermandad”, terminaba.