El Teatro Villamarta acogerá este viernes la representación de Ariadna, un montaje teatral que toma el nombre de la heroína griega y que será puesto en escena por la compañía sevillana Atalaya, que celebra con este título su XXV aniversario, al tiempo que abre en el coliseo jerezano el Ciclo Grandes Clásicos que continuará con Don Juan Tenorio.
Ariadna es la primera dramaturgia en castellano que aborda este mito, a pesar de ser uno de los más conocidos y representados en la historia del arte en general. Su historia se asocia al laberinto y al hilo u ovillo que permitió a Teseo escapar de éste y del Minotauro. Sin embargo, más allá de su personalidad, se aborda la figura de la heroína desde su lucidez y rebeldía.
La obra cuenta cómo la joven desafía el poder establecido de Minos (su padre, rey de Creta) y, movida por el amor, ayuda a Teseo a vencer al Minotauro y salir del laberinto. A continuación decide marcharse con él, pese a las repercusiones que esta acción le acarreará. El gran dilema de esta tragedia se sitúa entre la pasión por vivir y la sumisión a los dictados del poder terrenal y divino, ya que Ariadna rechazará el futuro que le ofrece Dionisos: la inmortalidad a cambio de convertirse en su esposa.
El texto lleva la firma de Carlos Iniesta, tomando como base extractos de las obras de Marina Tsvietáieva, Nietzsche, Ovidio, H. von Hofmannstahl, Catulo y David Pujante. De los tres finales que se han registrado de esta pieza teatral, Atalaya ha optado por el más complejo y, tal vez, por el desenlace que más se acerca a nuestro tiempo, en el que el suicidio se concibe como única salida acorde con el carácter rebelde de la protagonista. De este modo, se aleja del final feliz de una Ariadna inmortal presidiendo el firmamento pero sometida a Dionisos. También desecha rematar la obra con una mujer víctima de Artemisa, quien le da la muerte en la isla de Naxos sin aparente motivo.
Aurora Casado, Jerónimo Arenal, Joaquín Galán, Silvia Garzón, Raúl Vera, María Sanz, Lidia Mauduit y Alba Mata forman parte del reparto de una tragedia en la que la compañía sevillana ha estado trabajando un año. La escenografía es de Juan Ruesga y está inspirada en el agua. “El elemento principal es una vela, que ha venido del mundial que se celebró en Valencia, y se va transformando para crear distintos espacios”, señala Ricardo Iniesta, director de la compañía.
De la música es autor Luis Navarro, mientras que Esperanza Abad asume la dirección coral, puesto que los actores interpretan unos cantos étnicos que refuerzan el sentido mágico del espectáculo.
Ariadna cierra la trilogía de las heroínas de la tragedia griega que comenzó con Elektra y Medea, la extranjera, espectáculos con los que Atalaya ha recorrido más de 200 ciudades en 20 países de los cinco continentes. Este montaje, que se estrenó en junio en Sevilla, cuenta con la colaboración del Centro Andaluz de Teatro (CAT) y rinde homenaje a Carlos Iniesta, el autor del texto que falleció mientras tenían lugar los ensayos. Tras la puesta en escena de este mito de la tragedia griega, el Ciclo Grandes Clásicos del Teatro Villamarta continuará el 15 de noviembre con Don Juan Tenorio.
