Morales denuncia amenazas de muerte y un maltrato injusto

 A Morales le pincharon las ruedas de su coche y tuvo que salir en un furgón policial ante la presencia de cerca de un centenar de aficionados que le increparon a su salida de la junta general de accionistas y le pidieron que se fuera. Morales entiende que es una mafia organizada en contra suya.
“No entiendo lo que está pasando estos días. La presión que se le está dando a mi persona, que ya es acoso y derribo, cuando hemos conseguido algo importante, lo que nunca se ha conseguido en 62 años. Yo soy de carne y hueso, como todo el mundo. Se me está injustamente maltratando. De todo lo que pasa en el Xerez la culpa la tiene Joaquín Morales. De lo bueno no ha tenido culpa de nada: pasaba por aquí de casualidad. Y, cuando algo sale mal, al final, el  pagache siempre es el mismo. Estoy hasta los mismísimos de aguantar”.
Al terminar el consejo de administración, Morales dio una rueda de prensa para aclarar distintos aspectos. Dijo que iba a decir la verdad y comenzó con un monólogo que continuó con el tema del entrenador de quien dijo que “lo ha hecho de maravilla, pero no se ha quedado..,por dinero. Para mí hubiese sido más fácil decirle sí señor, pero yo tengo que mirar por el bien del Xerez. Mientras yo esté aquí, voy a defender los intereses del Xerez aunque me canten ‘Morales, vete ya’ o me manden desde una cabina mensajes, amenazándome de muerte y llamando a mi hija, mandándole mensajes en la misma línea. Yo soy el primero en que, si llega alguien, quiero irme. Estoy hasta los mismísimos del fútbol, pero ¿quién coño hay? Nadie. Pero vamos a relajarnos un poquito, que estamos en Primera División por primera vez en la historia y la deuda que tenemos, quince o dieciséis millones de euros, en Primera la podemos quitar”.
Recordaba Morales que llegó a Jerez hace cinco años y “cogí al equipo casi desaparecido y ahora estamos en Primera. Ese maltrato no me lo merezco. Estoy hasta los mismísimos de aguantar y no voy a aguantar más. El que crea que con la presión Joaquín Morales va a dudar o va a hacer algo que le perjudique al Xerez, se equivoca. Porque yo con las dificultades me crezco y muero en la pelea cuando tengo las ideas claras. No voy a firmar a nadie ganando más de lo que pueda pagar el Xerez. Con Esteban me llevaba cordial, pero en lugar de irme a almorzar veinte veces, iba tres. No soy un delincuente. No vengo a robarle a nadie. La casa de mi padre está embargada por un abogado de Jerez, por un asunto del Xerez. Esto es una mafia organizada, en ningún club han maltratado a nadie más que a mí en el Xerez” 
Reveló que “Esteban pedía para el cuadro técnico cerca de 1.300.000 euros y dos años” y sobre el asunto de Mendoza indicó que “primero cumplo mi palabra y después lo convenzo para que se quede”. Morales dijo que “a Mendoza se lo prometí y, cuando prometo algo, lo cumplo y además se va a quedar. Os lo digo ya: o sí o sí”.
Igualmente aseguró que “vamos a tener un buen entrenador y una buena plantilla. prometí sanear el club y lo vamos a hacer. Para mí sería más fácil dejar el lastre a otro, pero el Xerez no puede pagar 2.600.000 euros si a la décima jornada el equipo va mal y hay que echar al cuadro técnico”:
Se le cuestionó por el proyecto de la temporada y dijo que “mantenerse en Primera y sanear al equipo. Trabajando mucho y organizándonos en Primera.”.
Sobre los embargos de los empresarios de Linares dijo que “son contra Morales y la empresa Comprodesa y que yo sepa Comprodesa no tiene nada que ver en el Xerez”.  ¿Y Esteban, tuvo que ver con el pago de las nóminas? “Todos hemos ayudado. López nos dejó 100 mil euros que que tuvo que avalar el propio Morales y en la Diputación todos empujamos”.

Incidentes
Un centenar aproximado de aficionados xerecistas se manifestaron antes, durante y después de la junta general de accionistas celebrada en el Hotel AC. Con una pancarta de “Morales vete ya” estuvieron en los accesos del hotel y también de la sede social del club. Tuvo que hacer acto de presencia la Policía Nacional, con dos furgones, una vez que tuvieron conocimiento de que al coche de Joaquín Morales le habían rajado las dos ruedas traseras. El propio Morales tuvo que ser escoltado hasta el interior del club y la Policía se tuvo que hacer fuerte para impedir que los aficionados se aproximasen al máximo accionista en unos momentos de mucha tensión que finalmente se solventaron sin mayores incidencias, disolviéndose los manifestantes.

Presupuesto
Joaquín Morales reveló ayer, en la rueda de prensa, algunas de las claves de la temporada, como por ejemplo que el presupuesto va a estar “en torno a los 18 ó 20 millones de euros”, mientras que por el concepto de televisión “se recaudarán entre doce y catorce millones de euros”.
En torno al manido convenio con el Ayuntamiento que no se cierra nunca, a pesar de que ya lleva meses negociándose, aseguraba Morales que “creo que lo vamos a rematar pronto. La próxima semana tenemos la intención de enviar al Ayuntamiento el documento con lo que nosotros queremos. De momento ya les hemos mandado la documentación de los que nos exige la FIFA - ya que este equipo está en condiciones, al estar en Primera División, de poder jugar competiciones europeas- en torno a las exigencias en los campos de fútbol. Entendemos que en breve se van a poner manos a la obra para adecuar Chapín a las condiciones exigidas”.
Igualmente manifestó en torno a Miguel Ángel y Antonio Poyatos que “están renovados”, aunque es algo que hubo que sacárselo muy poco a poco ya que Morales pedía “un par de días para deciroslo”.
Insistió en que el equipo se va a sanear bastante en Primera y desveló que “un posible comprador me envió a las doce de la noche del pasado miércoles un mensaje en el que me decía que si yo capitalizaba la deuda que tenía con el Xerez, no compraba el club y yo prometí mi palabra de que iba a quitar esa deuda y he seguido hacia adelante, con lo que ese posible comprador parece que se retira”. Se le preguntó si ese comprador era Camúñez, pero no quiso decir el nombre. Posteriormente sí habló del empresario sevillano del que sacó “una impresión positiva” y desconocía una posible reunión que tenía prevista para la tarde de ayer con otro grupo de inversores. “Todo el mundo sabe las cosas, pero yo, que soy el c.., soy el último en enterarme de todo. De esa reunión no sé absolutamente nada, de verdad”.