Modo ironía.
Ya lo dijo en su día Zapatero poco antes de que entrásemos en la mayor crisis económica que se recuerda: “Estamos en la Champions League europea”. Inmediatamente después entramos en recesión. Y en ese momento, entramos porque cuando dijo estas palabras ya lo estábamos y seguía sin reconocer, al menos públicamente, que habíamos bajado a la Segunda B, junto con Grecia y Portugal.
Ahora no es que estemos en esa crisis pero la situación económica tampoco es para tirar cohetes. Sin embargo, estamos perdiendo poder dentro de la Unión Europea. La importancia real de España que es la cuarta potencia de la Unión Europea no se corresponde con el trato que se nos da. Sin ir más lejos, en el tema del Brexit , nos han dejado con un documento anexo con respecto al tema Gibraltar, que no tiene validez jurídica, anteponiendo a un país como Gran Bretaña y una Primera Ministra como Theresa May que no la quieren ni en su casa.
Igualmente, actitudes judiciales como la que ha tenido Bélgica con el tema de las extradiciones de Puigdemont y compañía. O las dudas que siempre muestra la Unión Europea con respecto a nuestras cuentas que nos dejan con las vergüenzas al aire. Todo esto demuestra que el trato que se le da a España por parte de la UE no se corresponde con ese cuarto puesto de potencia europea.
Pero es que creo que somos nosotros los que les damos los motivos y es que en Europa , me imagino que estarán siguiendo el modo suplicante con el que el Gobierno de España está pidiendo esa reunión con el Presidente de la Generalitat, Torra.
Y digo suplicante y si me apuran, humillante. Oye, que yo estoy siempre porque , por encima de todo, debe de haber diálogo. Pero una cosa es diálogo del Gobierno central con una Comunidad autónoma por muy histórica que esta sea(También los son Euskadi, Galicia y Andalucía), y otra muy diferente es el rogar , es humillarse pidiendo esa reunión o lo que es peor, una simple foto pero dándole a Torra y su grupo el estatus de otro país europeo que es la sensación que nos está dando a nosotros y, por supuesto, a la Unión Europea. Y mientras, Torra, dejándose querer y a ver si tiene tiempo de atender a Sánchez.
