Cuando la ciudad entera festejaba el triunfo de la selección española de fútbol tras ganar a Italia en la fina de la eurocopa, algunos lo celebraron de la forma más macabra y dañina: quemando contenedores en el barrio de María Auxiliadora.
Los hechos tuvieron lugar la madrugada del lunes, cuando un desaprensivo o varios, calcinaron los contenedores de recogida de envases y el de vidrio, situados junto a la parroquia de María Auxiliadora y frente a un conocido supermercado de la localidad. Lo peor es que el fuego se produjo a escasos cinco metros de una serie de vehículos aparcados en batería, con lo cual se podría haber provocado un grave daño.
Además, el contenedor de papel que se encontraba junto a los quemados también sufrió daños, a pesar de que en ese momento no se encontraba lleno, como también sufrió daños un cuarto contenedor destinado a la recogida de la basura orgánica. La dantesca imagen dejó un asfalto mugriento y maloliente, con infinidad de pequeñas tiras de fibra de vidrio muy contaminantes, que fueron esparcidas por el viento a lo largo de toda la calle.
La Delegación municipal de Medio Ambiente ha mostrado su repulsa a este probable acto vandálico que está siendo investigado por la Policía Local, como señaló a este medio el delegado del área, Pedro Mayo, visiblemente indignado por este suceso, sobre todo porque no es la primera vez que la emprenden contra el mobiliario urbano. En este sentido, recientemente también se quemó otro contenedor en la calle Extramuros de Algarrobo.
Mayo Venegas consideró que el coste económico de los destrozos superan los 700 euros, a lo que habría que sumar el coste en operarios para la limpieza del lugar y en productos especializados. Pero el daño más grave, según el delegado de Medio Ambiente, es el causado a la atmósfera, al medio y a la imagen pública de la calle. “No entiendo como algunos pagan su rabia”, señaló Mayo.