Arcos cobra este viernes 29 de enero un nuevo y valioso documento que viene a arrojar luz, y no otra cosa, a la dramática historia que sufrieron cuatro arcenses deportados al campo de concentración nazi de Mauthausen. Este abominable episodio ligado al lado más oscuro del ser humano y de la propia humanidad tuvo también su triste reflejo en la ciudad en aquellos años bélicos marcados por la Segunda Guerra Mundial y, poco antes, por la Guerra Civil española.
La Asociación por la Memoria Histórica de Arcos proyecta este viernes el documental ‘Memorias de la ceniza. Andaluces en los campos nazis. Mauthausen’, en recuerdo de cuatro arcenses que sufrieron el horror de los campos de concentración nazis. La proyección tendrá lugar a las a las 18.00 horas en la sala de La Molinera del palacio del Mayorazgo con entrada gratuita.
El documental será presentado por Ángel del Río Sánchez, guionista del mismo y delegado de la AMICAL de Mauthausen en Andalucía, que tras el visionado dirigirá un debate reflexivo sobre los andaluces en campos de concentración nazis.
El trabajo narra la vida de José Sánchez Rodríguez, Juan Panadero Román, Miguel Barrera Muñoz y Gabriel Neira Espejo, quienes, a causa del levantamiento militar del 18 de julio, la consecuente guerra y el posterior exilio, fueron apresados y trasladados a campos de concentración, donde vivieron uno de los mayores horrores de la historia: el holocausto nazi.
ïƒ Dentro del campo de concentración de Mauthausen, a los españoles se les diferenciaba del resto de prisioneros porque llevaban un brazalete con un triángulo azul, que significaba que eran apátridas, pues el Gobierno de Franco les había retirado la nacionalidad. Dentro de ese triángulo, en el centro, llevaban una S –Spanier-. Asimismo eran obligados a trabajar en una cantera de granito que existía en el campo. Para realizar esta labor tenían que subir 186 peldaños de escaleras cargados con piedras que, en muchos casos, acaba costando la vida. ïƒ
Los cuatro arcenses
José Sánchez Rodríguez había nacido en Arcos de la Frontera el 5 de agosto de 1893. En 1936 era guardia municipal de Infantería. Tras el golpe de Estado del 18 de julio, debido a sus ideales republicanos, se marchó del pueblo y pasó a la zona controlada por el legítimo gobierno de la Segunda República. Hizo la guerra con el bando republicano, y una vez terminada ésta, se exilió, al igual que cientos de miles de españoles, a Francia donde fue apresado por los nazis. Encarcelado en Angulema, más tarde, el 24 de agosto de 1940 fue trasladado a Mauthausen con el número 3.838. Allí moriría meses más tarde, el 2 de junio de 1941.
Juan Panadero Román también nació en Arcos de la Frontera, el 3 de febrero de 1902. Finalizada la guerra de España fue hecho prisionero y encarcelado por los nazis en XI-A de Altengrabow con el número 8.466. Más tarde fue deportado a Mauthausen, el 26 de abril de 1941 con el número 3.606. En el campo de concentración murió el 8 de octubre de 1941.
Gabriel Neira Espejo, el más joven y el único superviviente de los arcenses que se conocen que acabaran en campos nazis, había nacido en Arcos el 1 de mayo de 1913. Formaba parte del Sindicato de Construcciones y Afines C.N.T.-A.I.T. de Arcos, en el que había desempeñado labores en la junta directiva. Declarada la guerra, por una parte del Ejército español, a la República el 18 de julio de 1936, Gabriel se trasladó a zona republicana. Tras la guerra pasó a Francia donde fue apresado y encarcelado por los nazis que habían tomado Francia. Prisionero en XI-B de Fallingbostel al igual que el arcense Miguel Barrera, fue deportado a Mauthausen el 8 de septiembre de 1940 con el número 4.387. Fue liberado de este mismo campo de concentración por las tropas aliadas el 5 de mayo de 1945.
Miguel Barrera Muñoz nació en Arcos el 9 de mayo de 1904. Tras la Guerra Civil española fue apresado por los nazis y encarcelado en la prisión Xi –B de Fallingbostel con el número 87.243. Al igual que otros arcenses, fue trasladado a Mauthausen el día 27 de enero de 1941, con el número 5.838. Falleció en ese mismo lugar el 2 de noviembre de 1941.
Historia con “borrones”
Según expresa el presidente de la Asociación por la Memoria Histórica de Arcos, Antonio Ortega, “La historia de los republicanos españoles ha sufrido tachones, borrones y un sinfín de parches bajo la larga noche de la Dictadura franquista, tras la amnesia impuesta por el pacto de silencio en la Transición y por el miedo a recordar; un miedo como excusa de ideales que maltratan la historia y la verdad, y que de paso abofetean la dignidad. A la historia hay que mirarla de frente, sacudirla y desempolvarla para exprimir de ella enseñanzas y para entender el presente. Y más cuando es la más cercana”.
