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Este mes se podría disolver la junta de compensación de La Gallarda

El delegado de Urbanismo avanza que estudia medidas legales para prestar servicio público en la urbanización al no estar aún recepcionada por el Ayuntamiento

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  • El delegado de Urbanismo, Manuel Garrucho. -

La Delegación de Urbanismo se ha mostrado sorprendida de las declaraciones de Ai-Pro y, en menor medida, de IU efectuadas en la urbanización de La Gallarda.  El delegado del área, Manuel Garrucho, señala que “parece mentira” por parte de Ai-Pro que demande la recepción de la urbanización a pesar de haber podido realizar las gestiones durante su etapa en el equipo de Gobierno. Garrucho admite que a día de hoy no se ha disuelto la junta de compensación para dar paso a una entidad de conservación para la gestión que desemboque en una posible recepción municipal.

El delegado entiende que los compradores de las viviendas de la zona “no sabían muy bien donde se metían”, en alusión a la situación legal de la urbanización. Asimismo, alude a los plazos que marca la ley en este tipo de procesos.

En julio se celebró una reunión con vecinos y miembros de la junta de compensación donde se fijó un nuevo encuentro para analizar los trámites. “Pronto, esta situación se quedará atrás y habrá una solución, pero esto no es un huevo que se echa a freír. Hay que estar coordinados  con los vecinos, ante los que me quito el sombrero por su paciencia. Son los que más están colaborando en este asunto. En septiembre daremos un paso más para disolver la junta de compensación y crear la entidad de conservación”, señala el responsable de Urbanismo municipal.

En todo caso, y legalmente, el Ayuntamiento no puede prestar los servicios que requiere la población de La Gallarda, “pero estamos trabajando en ello. No queremos engañar a los vecinos y buscamos asesoramiento jurídico. Si se encuentra el camino, colaboraremos pero no vamos a generar situaciones de ilegalidad, porque hoy los políticos tienen que ser muy responsables y no vale el populismo. Si algo caracterizada al gobierno de Isidoro Gambín es su legalidad”, concluye Garrucho.

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