MANUEL GALVÍN
arcos | La UD Villamartín es uno de los equipos de nuestra comarca de los que no nos podemos olvidar en este medio al haber existido una correspondencia histórica de jugadores y aficionados entre las poblaciones de Arcos y la Villa. En estos momentos, el equipo que entrenan Manolo Holgado y Nino está jugando la fase de descenso en el subgrupo I, ocupando la primera plaza de la clasificación tras su victoria ante la UD Tarifa después de haber terminado antepenúltimo del ‘grupo de la muerte’, el subgrupo II, como le llamaron los técnicos. Ya se han jugado cuatro jornadas de esta liguilla de seis, con un balance para los villamartinenses de dos victorias, una derrota -ante el CD Vejer Balompié en campo vejeriego por 2-1-, y una jornada de descanso y a falta de dos jornadas y un solo partido pendiente, en el que recibirá en el Estadio Jesús Ruiz al CD Vejer, la UDV es líder de la clasificación.
El conjunto serrano comenzó perdiendo con el Vejer, pero sus dos triunfos frente al Tarifa le dejan en buena posición para lograr la permanencia. Según su técnico Manolo Holgado, “ha sido un año muy complicado y difícil, no solo por la pandemia, que nos ha afectado mucho en Villamartín, con bastantes jugadores contagiados durante el año, y solo hemos podido jugar con público unos pocos partidos”, se lamenta el míster de la UDV, quien forma un tándem indivisible con el espereño Antonio Benabé Durán ‘Nino’ desde hace mucho tiempo.
Otro factor que ha añadido incertidumbre y malestar entre los equipos de la fase de descenso ha sido el cambio de criterio de la Federación Gaditana deFútbol para establecer la clasificación en las fases de ascenso y descenso de la Primera Andaluza, un cambio que ha sido recurrido por el Recreativo Portuense y el CD El Torno, los equipos más damnificados con la nueva fórmula al aplicarse un coeficiente entre partidos jugados y puntos obtenidos. Lo mejor para la UDV es que ocupa la primera plaza del grupo de descenso con 1,29 de coeficiente. “Teníamos previsto, tanto directiva como cuerpo técnico, que tuviésemos que jugar la liguilla porque contamos con un equipo muy joven -11 de las 20 fichas corresponden a jugadores de menos de 21 años-, por lo que se trata de un proyecto a largo plazo, pero cuando te ves abajo en la tabla no es fácil de gestionar y te asaltan los nervios ante la amenaza de descenso”, argumenta Holgado.
Lo mejor de la UD Villamartín es que depende de sí misma para lograr una nueva permanencia en Primera Andaluza, que sería la octava consecutiva, y en la que se volverá a reencontrar con el CD Jédula, siempre que los villamartinenses amarren la permanencia. “Gracias a Dios dependemos de nosotros mismos y ganando o empatando en casa contra el Vejer nos podríamos salvar con la actual normativa de competición. Incluso si el Vejer empata en su casa con El Torno y el Tarifa pierda o empate con el Recreativo Portuense, creo que también nos salvaríamos, aunque perdiésemos el último partido que nos queda”, aclara Manolo Holgado, que hace tres jornadas no podía decir lo mismo, pero que ve las cosas con más optimismo a partir del cambio de criterio federativo. “Estamos trabajando y sin dejar de entrenar para evitar el efecto negativo que han tenido los continuos parones a lo largo de la temporada. Cuando lográbamos un par de triunfos seguidos se paraba el campeonato por la covid, fuese propia o ajena”.
Uno de los arcenses que ha militado esta temporada en el conjunto tricolor ha sido el exjugador del CD Jédula Luisma Hera y, por lo que cuenta su entrenador, le ha ido muy bien. “Estamos muy contentos con él. Es un gladiador en el centro del campo. No para de luchar durante los 90 minutos y es muy responsable y comprometido. Es raro que falte a algún entrenamiento y tanto compañeros como directivos y cuerpo técnico estamos muy contentos y ha sido uno de los mejores fichajes que hemos hecho en los últimos años, además de ser un buen futbolista que no para en todo el partido y que ofrece alternativas tácticas porque puede jugar de medio centro, de lateral e incluso de media punta. Ha sido un acierto rotundo”, afirma el míster villamartinense, que lamenta la marcha al Arcos de su portero titular Kaski, “al que no le pusimos ningún impedimento porque ha estado aquí con nosotros muchos años y lo ha dado todo por el club, pero nos afectó bastante su salida porque tuvimos que echar mano de Álvaro, que salía de su etapa como juvenil y no tenía demasiada experiencia, aunque en el futuro será un buen portero, y de Cristian, al que le costó recuperar la forma ya que estuvo en el Dos Hermanas y dejó de jugar a mitad de temporada, estando inactivo casi tres o cuatro meses y le costó adaptarse. En el fútbol base no se le puede cortar la proyección a los chavales, sobre todo si se han portado bien con el club”, reconoce el técnico villamartinense, que confía en conseguir la permanencia de la UDV, una entidad histórica del fútbol de la comarca que sigue formando excelentes jugadores que luego militarán en clubes gaditanos como, por ejemplo, el Arcos CF, donde juegan los hermanos González Carmona (José Antonio y Álvaro), Fran García, Carretero y el guardameta polichero Kaski, sin debutar todavía.
