Santiago Abascal revalidará su cargo al frente de Vox en la Asamblea General que se celebrará el próximo 27 de enero con una profunda remodelación del Comité Ejecutivo Nacional. El único candidato para pilotar los designios de la formación reduce de tres a una las vicepresidencias, que ocupará Ignacio Garriga, también secretario general, y se rodea de 15 vocales entre los que se encuentran los hasta ahora más significados miembros de la dirección: Javier Ortega Smith; el líder de Vox en el Parlamento Europeo, Jorge Buxadé; y la diputada Reyes Romero. De los 17 elegidos para conformar la cúpula directiva destaca el nombre de Blanca Armario. La arcense, actual presidenta de las formación en la provincia de Cádiz pone, de este modo, el colofón a una meteórica carrera en Vox, iniciada de la mano de José María Torrego en febrero de 2020.
Con Torrego, fugaz máximo dirigente del partido en Cádiz, Armario se hizo cargo de la Vicesecretaría de Formación, responsabilidad que compaginó con la Vicepresidencia con la designación de José Ortells como presidente interino y, posteriormente, de manera exclusiva cuando el isleño se impuso en las primarias a finales de septiembre del año de la pandemia.
Armario, considerada como “hábil e inteligente” por su entorno, mantuvo un perfil público discreto pero se ganó la confianza de la dirección regional y nacional por su labor interna. No en vano, en el pulso mantenido entre la vieja guardia en la provincia, con Agustín Rosety, Carlos Zambrano y Ángela Mulas, por un lado, y José Ortells y Manuel Gavira, por otro, resultó vencedora.
En el primer asalto de la pugna entre ambas facciones, Armario se impuso a Mulas y fue elegida como número dos en la lista para el Parlamento autonómico. La arcense también recibió el apoyo de Santiago Abascal para asumir la Presidencia provincial cuando Ortells, frustradas sus expectativas tanto en la Cámara autonómica como de cara a las elecciones generales, dimitió a solo dos meses de los comicios municipales del 23 de mayo de 2023. Y, finalmente, Armario ganó la partida para encabezar la candidatura al Congreso de los Diputados el pasado 28 de mayo en detrimento de Carlos Zambrano, que no tuvo más remedio que aceptar el segundo puesto, quedando, a la postre, sin escaño en la Cámara Baja.