Muy distendidos, muy relajados y muy bromistas. Como si todavía siguieran de vacaciones en ese Hawai retratado en su última película juntos. Así se han presentado en Madrid Adam Sandler y Jennifer Aniston, acompañados de la novata Brooklyn Decker. Y para muestra un botón: "No envidio ningún papel nominado a los Oscar este año, pero me habría gustado hacer de rey en El Discurso del Rey. Habría sido un gran reto como actriz", ha afirmado la risueña Aniston.
De visita en Madrid para promocionar la comedia romántica Sígueme el Rollo, dirigida por Dennis Dugan y que se estrena en España este 25 de febrero, el trío no ha escatimado sonrisas entre ellos y con los miembros de la prensa, siempre capitaneados por el incansable Sandler, quien ha asegurado que no le da miedo que se le otorgue "todo el peso por el éxito de esta película".
Siguiendo en esta línea autolaudatoria, el actor estadounidense primero ha reclamado el Oscar para sí mismo, si bien después ha preferido otorgar tal honor a Santiago Segura. Ambos se conocen del rodaje de Jack y Jill y parece que conectaron bien. "Me encanta Santiago, es magnífico", ha asegurado.
Sígueme el rollo cuenta la historia de un mujeriego cirujano plástico (Sandler), que pide ayuda a su asistente (Aniston) para que se haga pasar por su ex mujer, con el objeto de conseguir el amor de una despampanante jovencita. Este es sólo el inicio de una cadena de mentira superpuestas que provocan situaciones hilarantes. Ya con los hijos de la asistente de por medio, acabarán pasando todos juntos unas vacaciones en Hawai en las que cualquier cosa puede suceder.
Es en Hawai donde también aparece una de las secundarias de lujo de esta cinta, Nicole Kidman, dando vida a una operada antigua amiga de universidad de Aniston. Esta tarde, los tres protagonistas han defendido el uso de la cirugía plástica si a la gente le hace feliz. Sandler ha agregado que conoce a Kidman -que ha reconocido que no le gusta su aspecto tras haber usado botox- desde sus tiempos de actor en Saturday Night Live y que a ella el papel le pareció bien desde el principio y no tardó en sumarse al proyecto.
ANISTON: "ADAM ES INCORREGIBLE"
Sobre la evidente química entre ellos, Aniston ha bromeado al asegurar que la colaboración con Sandler es "muy complicada", ya que éste es "incorregible". En respuesta, el actor ha recordado que ambos se conocen desde hace años y se gustaban, pero nunca habían tenido, como hasta ahora, la oportunidad de pasar noventa días juntos y, además, en Hawai.
Preguntada sobre si le gusta que se refieran a ella como la reina de las comedias románticas, Aniston ha dicho que no tenía constancia de tal honor, si bien ha reconocido que le encantan las comedias y los romances, por lo que si tiene que "llevar alguna corona llevaría esa con mucho orgullo".
Acerca del punto en el que se encuentran sus respectivas carreras, Decker ha señalado que ella sólo está empezando y por eso lo que quiere es "empleo". "Empleo es lo único que quiero, y sería muy afortunada si pudiera tener una mínima parte del éxito que han tenido Adam y Jennifer", ha destacado.
Por su parte, Sandler ha afirmado que para él este sería el "momento de abandonar", pues ya ha hecho "todo lo que podía hacer" y, además, está "harto de todo", incluyendo a los periodistas presentes en la sala. Tras el correspondiente cambio de gesto, se ha limitado a afirmar que él es, en realidad, "feliz haciendo películas".
Finalmente, Aniston se ha mostrado "contenta de trabajar y madurar", por lo que espera "seguir trabajando y haciendo feliz a los demás hasta que sea una mujer muy muy muy vieja". "Me siento como al principio, el secreto es mantenerse fresca y animada, y a mi me encanta lo que hago. Tengo un amor muy fuerte por la comedia, que me hace muy feliz", ha sentenciado.