El tiempo en: Conil

Cádiz

Cuplés de carnaval y quejíos flamencos enseñan la lengua española en Alemania

El gaditano Alejandro Fernández, profesor en el Instituto Evangélico Johanniter de la ciudad germana de Wriezen, organiza con éxito la tercera edición de 'Así suena Cádiz' y, por ello, el Ayuntamiento de Cádiz y el Patronato del Carnaval, le han distinguido

Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai Andaluc�a Informaci�n Publicidad Ai
  • Fernández y sus alumnos

Alejandro Fernández tenía la idea de que el español no fuese una asignatura al uso y que entrase por el oído y el resto de los sentidos en Alemania, que es el lugar donde este gaditano ejerce como profesor en el Instituto Evangélico Johanniter de la ciudad de Wriezen.

El proyecto, llamado Así suena Cádiz en Alemania, que este año ha cumplido su tercera edición, que queda rematado con una 'guirigota', o chirigota de alumnos alemanes que también hacen ya sus pinitos en el jaleo y las palmas flamencas, se incluye dentro de una iniciativa que se puede considerar tanto académica como de contacto intercultural y que consta de objetivos didácticos en la enseñanza y aprendizaje del español como lengua extranjera en contextos reglados en Alemania y de difusión de la cultura española e hispánica. Para ello, Fernández ha vuelto a llevar bajo el brazo música típica de la provincia de Cádiz, como son el eco de las coplas de nudillos y 3x4 de Carnaval  y soniquetes del flamenco, sin dejar al margen otras músicas que sirvan de grandes vehículos para que la lengua de Cervantes con acento de Cádiz entre lo mejor posible, que sea dulce en su aprendizaje y placentera en su enseñanza.

Así suena Cádiz en Alemania se desarrolló el pasado mes de noviembre y contó con la académica colaboración de Jesús Monje López, artista y músico gaditano integrante del grupo Loss Monje y reconocido comparsista; Desiré Tey Vargas, gaditana diplomada en magisterio de música y carnavalera de largo recorrido y vocal del grupo Agaporni’s Funk; y Alejandro Suárez Roa, guitarrista profesional flamenco afincado en Múnich.

Como en las dos anteriores ediciones, los artistas se han desplazado a Berlín y diariamente a Wriezen, en Brandenburgo, donde se sitúa el instituto en el que los artistas mostraron el panorama musical gaditano y andaluz más idiosincrásico con el objetivo de apoyar y reforzar las clases de español que allí se imparten.

El año pasado los alumnos que participaron en el proyecto consiguieron aprenderse y ensayar lo que se consideraría “el primer pasodoble de la primera guirigota de la historia”, así como muchos otros ejercicios, demostrando que un ensayo de carnaval o un jaleo flamenco pueden ser didácticos, divertidos y efectivos a pesar del acento alemán. Los alumnos, ilusionados de nuevo, han disfrutado de lo lindo con la llegada de los artistas con quienes han tenido la oportunidad de experimentar el carácter y el habla de los gaditanos en un marco didáctico con fines académicos, de difusión e interacción intercultural.

Cabe recordar que los alumnos que mejor trabajaron durante el proyecto ganaron en la edición anterior un premio consistente en visitar Cádiz durante los carnavales con todos los gastos pagados, con visita al Falla en pleno Concurso y todo, premio que se repetirá con seguridad en esta edición, aunque aún esto no se ha confirmado.

Como viene siendo ya tradición, los artistas realizaron un concierto en el salón de actos del instituto donde los alumnos y otros profesores tomarán un papel primordial en la interpretación de los temas. El baile flamenco también estuvo presente en el ambiente.

Como novedades para este año, cabe señalar que el proyecto contó con una financiación más importante que otras ediciones, ya que la ciudad de Wriezen, el MinisteriumfürFamilien, Senioren, FrauenundJugend y el banco germano Sparkasse posibilitaron que los artistas, esta vez, contasen con una remuneración que, a juicio de Alejandro Fernández, “está más que justificada y merecida”. Los artistas, además de tener los gastos pagados, recibieron unos honorarios por sus servicios educativos y artísticos.

Por último, señala Fernández, que además de la presencia de los ya mencionados Monje, Tey y Suárez, este año se contó con Ana María Maqueda Hidalgo, Ana María Amahí, experimentada bailaora afincada en Alemania desde hace muchos años.

Reconocimiento  sorpresa
La expedición gaditana de artistas y maestros guardaban un secreto hacia el organizador del evento así suena Cádiz, pues el Patronato del Carnaval, y por ende el Ayuntamiento de Cádiz, le obsequiaba una escultura por su labor en la difusión de Cádiz, su cultura y su idiosincrasia.

Los artistas  amigos de Alejandro Fernández,  Jesús Monje, Desiré Tey y Alejandro Suárez Roa estuvieron guardando el presente que viajaba desde Cádiz durante toda la semana que duró la cita didáctico-gaditana y soportando el “chaparrón de quejas y de no puede ser y demás con respecto a la relativa desidia que, hasta ahora, se había podido comprobar en mi ciudad de origen en cuanto al trabajo que realizábamos en Alemania”, sostiene Fernández. Bien es cierto que este profesor y amante del Carnaval y de la cultura gaditana se dedica altruistamente a difundir Cádiz y a llevarla como bandera en el periplo educativo que supone enseñar el español como lengua extranjera. 

“Me entregaron la estatuilla en medio del concierto el viernes 8 de noviembre y además, Jesús Monje me cantó una canción escrita por él animándome a seguir haciendo esto que hago (y que me pregunté muchas veces por qué). La emoción pudo con mis piernas y mi voz porque no es fácil hacer algo que te recuerda en cada segundo de su realización, que estas lejos de tu casa y de tu familia. No suelo emocionarme en estas cosas pero la verdad es que, en dicho reconocimiento, que no me esperaba absolutamente para nada, exploté yo y me secundaron casi todos. Una experiencia maravillosa, dura, simple y sincera. Cuando los alumnos corren hacia nosotros para abrazarnos tras el concierto, tuvimos la certeza de que, a pesar de los errores, estamos en el camino”, concluye Fernández satisfecho, honrado y orgulloso de su labor de difusión del español en tierras germanas a ritmo de 3x4.

La prensa alemana se hizo eco de ‘Así suena Cádiz’

“Con un concierto de música española y una bailaora de flamenco finalizaba la semana cultural  Así suena Cádiz en el Instituto Evangélico Johanniter de Wriezen. Los alumnos mostraron que bien aprendieron sobre la forma de vivir y sentir en España”, con esas palabras se hacía eco el periódico alemán Oderland Echo de la semana cultural organizada por el gaditano Alejandro Fernández en la localidad de Wriezen.

La crónica, cuya traducción ha facilitado a este medio el propio Fernández, continuaba así: “Una lengua se puede estudiar. Pero entender una cultura, es algo más. El profesor Alejandro Fernández sabe de qué habla. Ilusionado porque ya sea la tercera edición de este proyecto, no escatima en elogios hacia los artistas y los resultados del proyecto, que consiste en trasladar un poco del saber vivir y musical de su ciudad de origen, Cádiz, a Wriezen. Esto se pudo comprobar en el concierto de fin de proyecto que se realizó en el instituto de la mano de Desiré Tey Vargas, Jesús Monje López y Alejandro Suárez Roa, así como de Canset, bailaora flamenco afincada en Berlín. El flamenco y el Carnaval de Cádiz les corren por las venas. El ritmo de las palmas, las melodías de la guitarra y las voces de estos “soleados” artistas se dejó impregnar en el público de la sala. Los alumnos tuvieron la oportunidad de participar en el concierto, tal y como se pretende en un proyecto de contacto intercultural como éste, y algunos de ellos, como Pauline Schulz o Vivian Franke pudieron preparar dos canciones que interpretaron sobre el escenario con el apoyo y el acompañamiento de los artistas. “Ha sido realmente divertido. Es una de esas experiencias que uno no puede olvidar fácilmente” resume Vivian Franke sobre el proyecto, “Ha sido conmovedor y emocionante. Incluso a pesar de la barrera del idioma que tenemos aunque estudiemos la lengua en la escuela, nos hemos entendido muy bien y eso nos ayuda para seguir mejorando nuestro español”, concluye Pauline.
Para Alejandro Fernández es importante que los alumnos distingan el carnaval típico de Alemania con el de Cádiz aunque no siempre sea fácil traducir las coplas carnavalescas al alemán: “En Cádiz prácticamente todo el mundo tiene algún tipo de relación con el carnaval, aunque solo sea como aficionado. El carnaval es para nosotros una oportunidad de exteriorizar nuestros sentimientos y visión crítica de las cosas”. La música del carnaval en Cádiz es algo cotidiano y pertenece incluso a la identidad del pueblo, a su idiosincrasia y a su forma de proceder. ¿Y cómo han reaccionado los alumnos ante el temperamento de los españoles? Los artistas responden: “Los alumnos están retraídos al principios, son tímidos, pero a través del quehacer profesional de los artistas y mediante grupos de trabajo y Workshops han ido asimilando los alumnos todo lo que pretendíamos”, traduce el profesor Alejandro Fernández.

Sobre el baile, el toque, cantar y transmitir cuestiones básicas sobre la música del sur de España, los alumnos se han mostrado muy interesados. “En estos tiempos de contactos efímeros (redes sociales) es necesario fortalecer y promover más el contacto real entre las personas” dijo el joven profesor sobre el escenario y que ocasionó un aplauso espontáneo entre el público que abarrotaba la sala.  Sobre el proyecto no solo quedaron convencidos alumnos y profesionales, sino el director mismo de la escuela, el señor Michael Tiedje. El destaca la profesionalidad y la capacidad pedagógica de los artistas: “(…) Y el proyecto fue posible gracias al apoyo de la Sparkasse Markisch-Oderland, al ayuntamiento de Wriezen y a la Landesaktionplan del Bildungsministerium. Del mismo modo, nos cuenta el director, invitamos a alumnos de la sexta clase de la escuela primaria Allende para conocer en persona el proyecto y disfrutar del mismo durante algunas horas. Una nueva muestra de contacto cultural entre alumnos, artistas y profesionales de la educación".

Los asistentes estuvieron muy contentos y sorprendidos tras el concierto. Especialmente destacó la presencia y el trabajo del alumno Marcel Weiße-Coronado que, a través de su madre de origen Peruano, ha aprendido el español perfectamente y que hizo las veces de traductor en el escenario y durante el desarrollo del proyecto. Su forma de hablar y de comportarse (comediante innato) hizo estallar en carcajadas al público más de una vez, en una curiosa complicidad y compenetración con su profesor, mientras traducían y explicaban en proyecto sobre el escenario. “El proyecto me ha gustado muchísimo. Realmente. La atmósfera española lo llenó todo” dijo Horst Massierer, el jefe de la orquesta de Schulendorf; “Son buenos. Estos saben lo que hacen”, dijo Frank Schütz, con un hijo que ha vivido por primera vez el proyecto. “Los niños no aprenden solamente palabras, sino experimentan la forma de ser y de vivir de la cultura española. Realmente genial.”

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN