El tiempo en: Conil

Campo de Gibraltar

Multas a los tres ingenieros de Endesa condenados por el accidente del 100% Fun en Tarifa

Dos de las empleadas afectadas murieron en la explosión en agosto de 2017 y otros seis trabajadores resultaron heridos. 2,8 millones de indemnización

Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai
  • 100% fun. -

El Juzgado de lo Penal número 2 de Algeciras ha condenado a tres ingenieros de Endesa y como responsables civiles directos a multas de 15 meses a 10 euros diarios –y un día de prisión por cada dos cuotas de multa que no satisfagan- por el accidente del hotel “100% Fun” de Tarifa en el que murieron dos trabajadoras y resultaron heridos otros seis empleados.

La sentencia, a la que ha tenido acceso VIVA, les condena por dos delitos de homicidio por imprudencia menos grave y seis delitos de lesiones por imprudencia menos grave, incluye, además de las citadas multas, la indemnización a los perjudicados de manera conjunta y solidaria con las empresas Axa Corporate Solutions Assurance y Edistribución Redes Digitales SL (antes Endesa Distribución Eléctrica). En total, la indemnización, en conjunto para todos los afectados, asciende a 2,8 millones de euros.

Se trata de una sentencia de conformidad que pone fin a la vía penal del juicio por este suceso, que también tuvo un contencioso por lo civil.

El suceso, que tuvo lugar sobre las 19.45 horas del día 5 de agosto de 2017, cuando los ocho trabajadores cenaban en el patio del hotel, cerca de una pared del transformador 29.272 cuando se produjo una deflagración que provocó quemaduras de gravedad a los empleados, dos de los cuales, Mari Luz Morillo y Sara Ojeda, murieron a consecuencia del accidente.

El tribunal considera probado que “la deflagración e incendio posterior del transformador se debió a la severa sobrecarga y sobrecalentamiento a que se había visto expuesto” el mismo, que provocaron “un fallo interno”.

Explica que “como consecuencia del calentamiento excesivo y la elevada presión que se generó, se sobrepasó la resistencia mecánica del aparato y se produjo una expulsión del líquido refrigerante que se hallaba en su interior, consistente en un aceite mineral, haciendo saltar el mecanismo de cierre de la válvula de alivio de la presión”.

Este aceite mineral, añade la sentencia, “se expandió por el interior del centro de transformación, lo que unido a la atmósfera que se creó, dio lugar a que se generara una combustión súbita y posterior deflagración que salió por la rejilla de ventilación, alcanzando a los trabajadores mencionados”.

Esta “sobrecarga, sobrecalentamiento y fallo del transformador se debió a las malas condiciones de ventilación que tenía la caseta en la que éste se encontraba”.

Endesa
Tras esta sentencia, Endesa ha reiterado "su más profundo pesar por el trágico desenlace del incidente ocasional".

"La compañía eléctrica reitera, una vez más, sus más sinceras condolencias a los familiares de las personas fallecidas, Mariluz y Sara, así como su apoyo a los heridos, Esther, Irene, Juan Antonio, Daniel, Francisco Javier y Francisco José, y sus familiares, a los que ha ofrecido, a través de las autoridades locales, su disposición para proporcionarles la ayuda que consideraban oportuna, especialmente en los primeros meses del incidente", explica en un comunicado remitido a EFE.

Señala que su intención ha sido siempre la de indemnizar los daños y perjuicios generados por el accidente, por lo que "con antelación al juicio ya había adelantado a los afectados de forma voluntaria los importes que habían definido sus peritos".

En esa misma línea -añade- ha llegado a un acuerdo con las partes en la vista oral "a pesar de entender que no existe responsabilidad penal de Endesa y mucho menos de sus empleados".

"Endesa ha procurado en todo momento alcanzar un acuerdo que, a pesar de conllevar una condena, posibilitara el cierre de este episodio judicial y que pueda aportar algo de tranquilidad a las familias afectadas y a los trabajadores de la compañía", indica.

La compañía subraya que se trató de "un accidente excepcional, imprevisible y fortuito, sin ningún antecedente similar en sus 128 años de existencia, ni en los más de 55.500 centros de transformación repartidos por el territorio de Andalucía".

Endesa explica que "al entender que el accidente ocurrió en una instalación eléctrica" de su titularidad "no ha evadido sus responsabilidades civiles" y ha implementado mecanismos para evitar nuevos siniestros similares.

Así ha iniciado la sensorización de sus centros de transformación "para añadir un control extra al estado de sus instalaciones, además de sus revisiones periódicas, que permita monitorizar y detectar de forma preventiva posibles comportamientos anómalos".

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN