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El CSKA hace historia y deja con la miel en los labios al Sevilla

El CSKA de Moscú hace historia al clasificarse por primera vez para los cuartos de final de la Liga de Campeones después de ganar por 1-2 en el campo del Sevilla. En el otro partido Mourinho hunde al Chelsea y mete al Inter en la siguiente ronda.

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  • El argentino Federico Fazio (i) y el costamarfileño Didier Zokora muestran su desolación tras ser eliminados. -
El CSKA de Moscú hace historia al clasificarse por primera vez para los cuartos de final de la Liga de Campeones después de ganar por 1-2 en el campo del Sevilla, equipo que otra vez, como hace dos temporadas, se quedó con la miel en los labios de meterse entre los ocho mejores del continente.

La formación hispalense se encontró con un rival que entendió muy bien el partido, pese a que traía la eliminatoria casi perdida de la ida, mientras que el Sevilla sólo puso derroche físico, algo insuficiente en la máxima competición europea de clubes.

El equipo español salió al terreno con la ventaja que le daba el empate a un tanto de hace dos semanas en el estadio Luzhnikí moscovita y que el 0-0 inicial le clasificaba, pero, de entrada, esa circunstancia no hizo especular a los locales con el resultado.

A los tres minutos, en la primera ocasión que funcionó la banda derecha por donde entra Jesús Navas, el internacional sevillano dio un magnífico pase al área chica que enganchó el brasileño Luis Fabiano, pero su disparo a quemarropa lo interceptó de manera milagrosa el meta ruso Igor Akinfeev.

La formación visitante capeó el empuje inicial del rival y conforme avanzó el partido equilibró el juego con una línea media muy adelantada de hasta cinco hombres que ejercieron de delanteros junto a su hombre más en punta, el checo Tomás Necid.

El CSKA tuvo claro que debía marcar para llevarse la eliminatoria y atacó mucho, sobre todo por la banda izquierda por la que actuó el internacional chileno Mark González, pues el ex futbolista del Real Betis estuvo siempre participativo.

El descaro del equipo que entrena Leonid Slutsky a la hora de atacar también sirvió al Sevilla para intentar el contragolpe en espacios libres que encontró en la defensa del adversario, pero lo que más imperó fue el respeto entre ambos conjuntos.

De este intercambio de golpes, salió primero beneficiado el CSKA, cuando en el minuto 38 una buena acción de Honda, futbolista que mostró mucha calidad cada vez que participó, dejó el balón claro para que Necid, con precisión, se la pusiera imposible a Palop por bajo y ajustado a la cepa de un poste.

Dos minutos tardó el equipo de Manolo Jiménez en equilibrar el choque, con un tanto por bajo del argentino Diego Perotti ante la salida de Akinfeev, gol que empataba el encuentro y también la eliminatoria, por lo que quedó todo abierto para la segunda mitad.

Jiménez dio entrada desde el inicio del segundo período a Frederic Kanouté en lugar de Diego Capel para dar más fuerza a la delantera andaluza y fue el malí, junto con Perotti, los que no llegaron por poco a un medido centro de Jesús Navas en lo que pudo ser el 2-1.

La respuesta visitante llegó muy poco después, pero en esta ocasión sí se tradujo en gol, en un saque de falta que lanzó Honda y al que no supo responder Andrés Palop al resbalársele el balón de las manos.

El asedio sevillista no dio frutos, porque nunca supo crear verdadero peligro frente a un CSKA que controló a la perfección su ventaja.

CHELSEA-INTER

Una enorme expectación acogió al portugués José Mourinho, quien regresó ayer con su Inter a Stamford Bridge, un estadio en el que todavía se le idolatra, para hundir al Chelsea con un 0-1, obra del ex barcelonista Samuel Eto’o, y meter al once italiano en los cuartos de la Liga de Campeones.

Los blues, a quienes ahora tutela el italiano Carlo Ancelotti, apartaron los sentimentalismos para lanzarse, desde el minuto uno, a la yugular de su invitado aunque anoche les fallara la precisión. Fútbol de ataque que buscó de forma incansable la meta de Julio César, pero sin frutos.

El once local encadenaba ocasiones buscando la redención por la derrota de la ida en Italia. Pero el equipo de José Mourinho venía preparado. Samuel Eto’o perdió un gran momento en el minuto 33 al no saber aprovechar un despiste del capitán del Chelsea, el central inglés John Terry.

El conjunto londinense se fue al descanso con la sensación de que el colegiado, el alemán Wolfgang Stark, les negó un penalti por una falta de Thiago Motta sobre Branislav Ivanovic.

La intensidad del primer tiempo se reanudó con ese mismo tempo en el segundo acto. Los blues, con la certeza de que necesitaban números para continuar vivos en el torneo.

Se notaba como la frustración inglesa aumentaba al igual que la cerca defensiva italiana se hacía más infranqueable.

En el minuto 65, el Inter tuvo en sus manos un momento que pudo haber sido decisivo pero que dejó pasar. De nuevo, un error defensivo de Terry dio a Sneijder la ocasión de tocar de cabeza la pelota para dar a Milito una brillante oportunidad que éste no supo convertir y que provocó una airada reacción de su míster.

Mou presenció cómo sus hombres lanzaban por la borda nada menos que cuatro ocasiones cuando quedaba un cuarto de hora. Dos de Milito, una de Sneijder y otra de Motta.

Pero finalmente, la destreza del Inter se impuso a los intentos desesperados del Chelsea. Ocurrió en el minuto 79, con un remate de Eto’o, que remató a gol una jugada iniciada por Sneijder y que sorteó a Ivanovic.

El revés empeoró con la roja que supuso la expulsión, en el minuto 86, del punta Didi Drogba.

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