El contexto de desaceleración de la inflación y unos mercados laborales sólidos está permitiendo un incremento de los salarios reales en la mayoría de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que advierte de que España se encuentra entre aquellos miembros donde los salarios "han disminuido más desde el inicio de la pandemia".
"A pesar de tendencias positivas en el mercado laboral, España se encuentra entre los países de la OCDE donde los salarios reales han disminuido más desde el inicio de la pandemia", resume el 'think tank' de las economías avanzadas en su informe 'Perspectiva del Empleo 2024'.
En este sentido, la organización con sede en París recuerda que, a pesar de que los salarios nominales en España han aumentado por encima de la inflación en 2023 y principios de 2024, los salarios reales, descontando la inflación, seguían siendo un 2,5% inferiores en el primer trimestre de 2024 respecto del cuarto trimestre de 2019.
Por el contrario, añade la OCDE, casi la mitad de los 38 países miembros, incluidos los vecinos Portugal y Francia, han recuperado con éxito los niveles salariales reales anteriores a la crisis o los han superado.
Respecto de esta distinta evolución, en el caso español advierte de que el país se enfrenta a una mayor inflación interanual en comparación con la zona euro, con una lectura de 3,8% y 2,6%, respectivamente, en mayo, "lo que supone una barrera para el crecimiento de los salarios reales".
SALARIO MÍNIMO
Por otro lado, al contrario de lo sucedido en el caso de los salarios en general, la OCDE destaca que el salario mínimo en España ha crecido por encima de la inflación.
En concreto, la subida acumulada por el salario mínimo en España desde 2019 tras los sucesivos incrementos acometidos es del 26% en términos nominales desde antes de la pandemia.
Sin embargo, por efecto de la inflación esto se traduce en un aumento real del 6,5%, ligeramente por debajo de la mediana de la OCDE.
En este sentido, en mayo de 2024, el salario mínimo real era un 12,8% más alto que en mayo de 2019 de media en los 30 países de la OCDE que tienen un salario mínimo legal a nivel nacional, mientras que el incremento mediano fue del 8,3%.
En su análisis, la OCDE recuerda que el Gobierno español tenía como objetivo aumentar el salario mínimo hasta alcanzar el 60% del salario medio, hito logrado en 2023, por lo que anticipa que "es probable que futuros aumentos del salario mínimo sean más moderados".
Por otro lado, la organización internacional considera que el aumento del salario mínimo en España "no ha supuesto un desafío significativo para el crecimiento del empleo", que ha sido sólido durante todo el período.