El fallecimiento de la artista, cuyo funeral se celebró ayer en la parroquia de Santiago el Mayor de Utrera (Sevilla), es consecuencia de una enfermedad que sufría desde hace algunos años.
Josefa Loreto Peña, que nació en el número 19 de la utrerana calle Nueva el 1 de mayo de 1926, era nieta del mítico Pinini, e hija del bailaor jerezano José Loreto Reyes El Feongo y de María Peña Vargas.
Pepa de Utrera se inició en el cante siendo una niña, en reuniones y fiestas familiares, hasta que a mediados de los años 50 debutó como cantaora en el famoso tablao Cortijo del Guajiro de Sevilla.
Considerada por muchos como una de las pioneras de la rumba flamenca, Pepa de Utrera se trasladó a Madrid durante la década de los 60.
También actuó con éxito en varias ediciones de la Bienal de Arte Flamenco de Sevilla, en la Expo 92 o en el Festival de Arte Flamenco de Mont de Marsan.
En septiembre de 1987 fue galardonada con el Mostachón de Oro en su pueblo natal, y en ese mismo año la peña flamenca Curro de Utrera le tributó un homenaje, en la III edición del Festival del Mostachón.
En el año 2006, se inauguró un mosaico colocado en la entrada de la calle Nueva que sirve para dejar constancia del lugar donde estuvo la casa natal de la artista.
Además, el Pleno del Ayuntamiento de la población de Utrera acordó por unanimidad rotular una calle de nueva creación como Pasaje de Pepa de Utrera, en la urbanización que actualmente se construye en la trasera del Santuario de Consolación, una iniciativa promovida por los miembros de la caseta de feria Amigos de Fernanda y Bernarda.