El Betis expira sus últimas jornadas en Primera División y con pocas cosas ya que decir en cuanto a la lucha por eludir el descenso se refiere, por mucho discurso positivo que se quiera vender desde dentro del club verdiblanco, que por otra parte, es lo que le toca hacer.
Tras una temporada colmada de registros negativos y líos institucionales que han desestabilizado a la entidad desde todos los ámbitos; los de Gaby Calderón desean poder ofrecer al beticismo su último acto de servicio en el derbi que se celebrará dentro de seis días en el Villamarín.
El cuarto y último de esta campaña que además, se disputará en una fecha tan señalada para los sevillanos como es la del Domingo de Ramos.
Así, tanto el cuerpo técnico como la plantilla desean poder brindar una victoria de ‘despedida’ para una afición resignada, pero que al mismo tiempo, espera no verse humillada por el eterno rival de la ciudad; más aún tras el varapalo que supuso la eliminación europea en el mismo escenario con una crueldad que no se recuerda.
Desde el seno de Heliópolis ya se prepara un llamamiento para que el estadio presente un colorido acorde con la importancia de un partido, que se espera, pueda servir en el Betis de redención antes del castigo final, que no es otro, que la Segunda División.
Ya a la venta las entradas para el derbi sevillano
Oscilarán entre los 45 y los 90 euros; siendo el precio entre 30 euros para la afición del conjunto sevillista, al igual que lo fueron para los béticos en el encuentro de la primera vuelta. Las taquillas del Benito Villamarín abrirán en horario de 11 a 14 horas y de 17 a 20 horas todos los días desde este martes hasta el próximo sábado.
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“Nos gustaba mucho su filosofía de juego donde se pivotaba sobre la posesión. Cuando las cosas no van bien se mira hacia el banquillo como es habitual en el fútbol y es verdad que a toro pasado es injusto decirlo porque es lo fácil", afirmó en una entrevista para el periódico
L’Esportiu de Catalunya.