El centrocampista Sergio Busquets, que finaliza su contrato con el Barcelona en junio de 2018, ha asegurado este martes que sólo su mujer y Pep Guardiola podrían hacer que no siguiera en el conjunto azulgrana.
"Siempre he dicho que sólo hay dos personas que puedan cambiar mi decisión de estar aquí. A nivel personal, mi mujer, y a nivel deportivo, Guardiola", ha confesado en una entrevista a ESPN.
En este sentido, el jugador de Badia reconoce que mantiene una relación especial con Guardiola, el técnico que le hizo debutar como profesional, pero no cree que le pida que se vaya con él cuando la próxima temporada coja las riendas del Manchester City.
"Claro que le debo mucho a Guardiola y, para mí, trabajar para él otra vez sería un honor, pero él sabe que mi club es éste, para él su club también es éste y sabe que lo mejor para mí y para el club es que esté aquí. Así que no creo que me lo vaya a pedir", ha argumentado.
El centrocampista, que a sus 27 años se encuentra en el mejor momento de su carrera y se ha convertido en una pieza insustituible en el engranaje del juego azulgrana, espera ampliar su contrato en breve.
"La intención del 'staff', de la directiva y la mía es que esté aquí mucho tiempo y el tema del dinero no va a ser un problema. Está claro que me gusta que me reconozcan en todos los ámbitos, pero si fuera por dinero seguro que otros equipos me pagarían mucho más", ha apuntado.
Mientras se cierran los flecos de su nuevo contrato, Sergio Busquets seguirá brillando lejos de los focos. "Siempre he querido que mi trabajo se reconociera dentro del campo y no por ser más mediático", reconoce uno de los capitanes del conjunto azulgrana, quien ha querido dejar claro que eso no quiere decir que no sea ambicioso.
"Quiero que las lesiones me respeten, y ojalá que cuando acabe mi carrera aquí pueda pasar a la historia como un buen jugador que ha ganado títulos y haya sido uno de los que más partidos ha disputado con el Barça", ha sentenciado.
