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El Puerto

Unión Portuense pedirá explicaciones a Beardo por el ‘Caso Reciclaje’

Para Javier Botella, "el Gobierno de Beardo en lugar de apoyar la iniciativa e intentar solucionar el problema, lo que usó fue la coacción"

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  • Salvador González Mateos. -

Unión Portuense presentará una moción al próximo Pleno para que el equipo de Gobierno municipal rinda las debidas explicaciones a Salvador González Mateos, y a los portuenses, “por la persecución realizada a este ciudadano, quien en septiembre de 2020, denunciaba las deficiencias en el servicio de reciclaje y limpieza que presta el Ayuntamiento y al que una jueza ha absuelto en sentencia firme, condenando al Ayuntamiento portuense al pago de las costas”.

Salvador González organizó una original isleta de reciclaje en Los Altos del Manantial, para favorecer esta práctica entre sus vecinos y llamar la atención por la incapacidad y mala gestión de los responsables municipales, así como para denunciar las conductas incívicas de algunas personas. Los residuos clasificados eran transportados por él mismo hasta los contenedores municipales o el punto limpio.

El Gobierno de Beardo “en lugar de apoyar la iniciativa e intentar solucionar el problema, lo que usó fue la coacción. Tanto Marina Peris, como Millán Alegre tuvieron la oportunidad de evitarle gastos al ciudadano portuense y evitarse a sí mismos el bochorno de que una jueza en sentencia firme dé la razón al activista, confirmando que los servicios de gestión de reciclaje son deficientes”. 

En palabras de Javier Botella, portavoz de Unión Portuense: "El Gobierno municipal, nunca debió enviar un efectivo policial a todas luces desproporcionado, recordemos que se presentaron cuatro agentes en su casa a las una de la madrugada, para acallar una reivindicación ciudadana, no solo pacífica, sino que, además, meses más tarde, la Justicia ha considerado ajustada a derecho”.

Javier Botella considera “inaceptable que se haya aplicado la “ley mordaza” a un ciudadano que estaba ejerciendo un derecho fundamental como es la protesta pacífica, máxime, cuando lo hacía desde un comportamiento ejemplar y colaborativo. Estas son las formas de un gobierno que no admite la crítica y que cuando ésta se produce, utiliza la represión ante la falta de argumentos para defender su nula gestión”.

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